Injusto juicio contra líderes catalanes

20/03/2019
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Vicens Giralt, Robert González y Rafael Vidal Anglès
Foto: GRN
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-El Estado español ha decidido que prefiere perder la democracia a perder Cataluña

 

-El movimiento independentista catalán ha sido muy pacifista

 

-El 20% del PIB de España lo genera Cataluña

 

-Mientras Cataluña no pueda ser independente, estamos creando una república virtual

 

Ciudad de México.– Rafael Vidal Anglès, presidente del Orfeó Català de México; Robert González García, doctor en Ciencia Política, profesor de tiempo completo en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, miembro de la Asociación Nacional Catalana y del Comité de Defensa de la República Catalana; y Vicens Giralt, miembro de la Asamblea Nacional Catalana, han repudiado la injusticia que se cierne en el procés que se lleva a cabo en Madrid, contra doce líderes catalanes acusados de rebelión, sedición, violencia y desobediencia civil, por haber organizado el referéndum en pro de la autodeterminación de Cataluña, el 1º de octubre de 2017. 

 

En entrevista, han compartido sus impresiones sobre el fenómeno Vox, chalecos amarillos y la situación económica que vive España, a más de diez años de la crisis financiera mundial. Evocaron, además, las relaciones de gran solera entre el pueblo catalán y el mexicano.

 

––¿Cómo explicar el juicio contra los líderes de Cataluña?

 

Robert González (RG). – Que es un juicio injusto y en el que no se respetan los derechos humanos ni las garantías procesales mínimas contra los representantes políticos legítimamente elegidos por el pueblo catalán. Estas personas se encuentran encarceladas de manera preventiva porque aún no hay sentencia firme contra ellos desde hace más de un año. En el proceso se les están pidiendo condenas de entre 15 y 30 años, por delitos que no han cometido.

 

Rafael Vidal Anglès (RVA). – A nuestros líderes se les imputa un delito de rebelión, lo cual supone un alzamiento armado; que no lo hubo. Los únicos que tenían armas eran la policía española que golpeó a nuestros hermanos e hijos. El delito de rebelión supone también la existencia de un jefe. El jefe debería ser nuestro president Carles Puigdemont, quien ya ha sido juzgado en Alemania y ha sido declarado inocente. Alemania, Suiza, Inglaterra, Bélgica, han considerado que tales delitos no existen. Están libres dentro de la Comunidad Europea, pero no pueden entrar a España porque serán perseguidos y encarcelados. Se está juzgando a los segundos de abordo porque el jefe no se encuentra y no es culpable de los delitos que se le imputan.

 

Vicens Giralt (VG). – No cometieron los delitos atribuidos. El otro día, el Delegado del Gobierno español en Cataluña argumentó que la policía había recibido ataques con jabón lavavajillas Fairy, para que resbalaran y cayeran. A tal nivel de ridículo para acusar de violencia a los catalanes. Hace risa, pero no tanto porque tenemos a personas encarceladas por más de un año.  

 

El actual Ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, catalán pero anti independentista, hizo un llamamiento para desmentir lo que estamos diciendo los catalanes, que casi no tenemos medios de comunicación. La embajada convocó a una rueda de prensa para defender que España es un Estado de Derecho, que esas personas cometieron delitos muy importantes. El embajador se plegó a esa estrategia en obediencia a su superior jerárquico.  

 

–Concretamente, ¿qué es lo que reivindica la Comunidad Catalana?

 

RG. – Lo que queremos dejar claro es que no solo somos independentistas. La cuestión de los presos va más allá de la independencia. Es una cuestión de democracia. A cualquier demócrata debería indignarle que en un Estado supuestamente democrático como es España, se están cercenando derechos como la libertad de expresión, manifestación, ideología y pensamiento, al encarcelar a personas por sus ideas políticas.

 

En este sentido estamos llamando a los catalanes y a la sociedad mexicana, a que tomen conciencia de esta gran injusticia y nos ayuden de algún modo, ya que el Estado español ha decidido que prefiere perder la democracia a perder Cataluña. Que la sociedad civil presione para que no continúe esta aberración contra los derechos humanos de esas personas que tienen familias, hijos y que se les ha privado de su libertad de manera injusta.

 

RVA. – Cada vez hay más figuras públicas españolas que suman a nuestra causa, de que esta gente son presos políticos. Conocen la historia de los catalanes y se suman a nosotros. El mismo País Vasco se está sumando de modo fuerte porque ellos a su vez lo intentaron de una manera diferente.

 

VG. – En este juicio no se cumplen las garantías procesales. España está diciendo que la ley va por encima de la democracia. Eso no es así: la democracia va por encima de la ley, decimos los catalanes. En ese aspecto, Franco, Pinochet, hicieron muchas leyes. Con las leyes se puede organizar una dictadura totalmente aberrante.

 

Ellos se saltan su propia ley. Al juez Manuel Marchena, que preside el Tribunal Supremo, se le encontró un mensaje de WhatsApp donde dice que tiene animadversión por los acusados, que “estos se iban a comer la cárcel” y que estaba todo controlado. Esto es público. En cualquier país democrático ese juez hubiera sido apartado del juicio. Es parcial. No ha habido manera de revocarlo. Se suma a una serie de irregularidades que no se apegan al derecho procesal.

 

Los catalanes en general estamos indignados. 

 

–– ¿Cuál es su opinión de movimientos sociales como los indignados o chalecos amarillos en Francia?

 

RG.– Son movimientos de tipo social que reivindican una serie de derechos sociales, por las mal llamadas reformas laborales, que están desregulando el mercado laboral, reducir las prestaciones sociales, etcétera. Llegó el momento en que estos movimientos han tenido que salir a la calle porque ya no les sirven los instrumentos políticos, como los partidos. Se tiene un presidente, en Francia, Macron, que es producto de la mercadotecnia. Es ridículo. No tiene ideología ni partido. Lo crearon las élites de la banca y las grandes empresas para sostener ahí a un aliado, porque se venía la izquierda.

 

Lo que hacen los franceses es un ejemplo de lucha, es legítimo. Desde que hicieron la Revolución en 1789. Fueron más hábiles que nosotros al cortarle la cabeza al rey. Y ya no tuvieron más problemas en ese sentido. Nosotros hemos sido poco beligerantes y tenemos todavía a los Borbones en España y Cataluña.

 

Pero como es un movimiento muy amplio, no tiene una dirección muy clara. Muestra el rechazo a las medidas señaladas. Lo hacen de una manera contundente ocupando el espacio público, sin problema, al quemar llantas y vehículos.

 

Mientras que el movimiento independentista catalán ha sido muy pacifista. Ahora estamos asistiendo a un ridículo en el juicio. Nos están juzgando por votar. Por depositar la papeleta en una urna. Claro, votamos la independencia.

 

Están tratando de demostrar que el votar es un acto violento, cuando todo mundo puede ver la que la violencia sale de los policías golpeando a los ciudadanos.

 

RVA. – Se votó en octubre y después en diciembre y salió el mismo resultado. Volvió a ganar el independentismo. Es estúpido que te condenan por la votación del 1 de octubre y después que Rajoy no podía convocar a las votaciones en Cataluña, porque a pesar de no estar en derecho, lo hizo; y el resultado de esa votación salió igual a la prohibida.

 

VG. – Chalecos amarillos e independentistas catalanes son movimientos de diferente naturaleza, pero reflejan que cuando la sociedad civil esta incómoda sale a la calle. Sea por defender su cultura, lengua, economía o por otros motivos.

 

–¿Tal como en el 8M?

 

RG. – Me parece admirable lo que están haciendo las mujeres. Es un paso más para intentar empujar desde la ciudadanía para resolver injusticias que no son de ahora, sino históricas. Ya tenemos una madurez democrática. Las mujeres nos están dando un ejemplo. Que en España sean capaces de parar la economía por un día demuestra que hay que tomarlas en cuenta, respetar y dirigirnos a la igualdad. No puede ser que tengan peores salarios, que se tengan que encargar de las tareas domésticas; tenemos que compartir responsabilidades.

 

RVA. – En todo el mundo es lo mismo. Se le trata mal a la mujer, se le paga menos que a los hombres; se les respeta menos.

 

– ¿Cuál la postura de Cataluña frente a Europa?

 

RG. – Es admirable que los ingleses y los franceses resuelvan sus diferencias por la vía democrática, es decir, votando. Nosotros como catalanes, somos europeístas. Se nos ha acusado de lo contrario. Los catalanes siempre han sido pro europeos. Una cosa es ser independientes de España y otra es poder compartir con los demás pueblos de Europa una federación o un gobierno supranacional en lo que la mayoría de los catalanes están de acuerdo.

 

RVA. – Somos una parte muy trabajadora. Aportamos mucho. El 20% del PIB de España lo genera Cataluña. Nuestra deuda sería pagable en 20 años. No la de España. Se trata de demostrar ante la Comunidad Europea para que se den cuenta que no todos somos iguales.

 

VG. – Hay mucha solidaridad entre los pueblos europeos. Los occitanos, flamencos, irlandeses, están muy empáticos con los catalanes. A lo mejor a nivel de Estados u organizaciones supranacionales, no; pero a nivel de pueblos sí que hay mucha empatía con las causas catalanas.

 

RG. – La Unión Europea está dominada por élites que no toman en cuenta a los pueblos ni en el aspecto nacional ni social. Pero debemos aclarar que no hay un sentimiento anti europeo en el movimiento catalán. Los partidos políticos son muy pro europeos.

 

–En este escenario, se vienen ya las elecciones generales del 28 de abril, ¿cuál es la hoja de ruta de la Comunidad Catalana en México de cara a este proceso?

 

RG.– Frente a las elecciones del 28 de abril, la mayoría de la comunidad catalana en México estamos de acuerdo en votar a partidos catalanes independentistas. Puede ser que varios de ellos se presenten a las elecciones. Lo que hay que apostar es por una fuerza catalana en el Congreso español para defender nuestros intereses. Ha habido momentos que hemos votado a otros partidos; pero ahora mismo, como está las cosas tenemos que apostar por los partidos que están a favor de la república catalana.

 

VG. – Una de las acciones que estamos organizando a nivel administrativo es la participación en las votaciones del próximo 28 de abril. Pero tenemos un sistema muy arcaico. Se debe solicitar el voto por fax, se recibe las boletas por correo ordinario y después se acude a la Embajada (de España en México) a votar. En el siglo XXI es lo más arcaico que hay. Desde dos meses antes hay que hacer los trámites burocráticos para, a lo mejor, tener la suerte de votar.  

 

RVA. – Pero como los votos se quedan en la Embajada, no sabes si llegarán a tiempo allá para ser contabilizados. No nos consta que lo que se hizo aquí tenga repercusiones allá. Pero no puedes dejar de hacerlo porque es un privilegio de los que vivimos afuera. Un derecho. No sabemos si funcionará, pero hay que hacerlo.

 

VG. – Como resultado, menos del 10% votó en las últimas elecciones, de los catalanes que viven en México. Veremos esta vez qué porcentaje vota.

 

– ¿Cómo explicar la aparición de Vox?

 

VG. – Es el resurgimiento de la extrema derecha. Es un mal mundial, en Brasil con Bolsonaro, en Francia, Le Pen, y en otros países.

 

RG. – Es la extrema derecha. En el caso español tiene un punto que nos avergüenza mucho: es franquista. Es como algo anticuado.

 

RVA. – Murió Franco; pero no el franquismo.

 

RG. – Recoge la oleada de neofascismo de extrema derecha en el mundo. Vox lo hace a la española, de una forma que nos genera mucho repudio, sobre todo a la gente que vivió la dictadura.

 

RVA. – Tienen odio; se les nota un dejo de odio.

 

RG. – Odio contra los catalanes, las mujeres, los migrantes, extremadamente machistas. Quieren anular todas las leyes de igualdad que se han aprobado en algunas comunidades. A favor de la caza de animales. Se jactan incluso del maltrato animal. Es una cosa bastante peligrosa. Sobre el tema de Cataluña, defienden que se suspenda la autonomía, que sea tomada por el Estado español, que se cierre la televisión catalana; es decir, una serie de medidas que son propias de una dictadura. Defienden instaurar una dictadura básicamente. Es alarmante, pero tampoco hay que volverse loco. Hay que situarlo en su dimensión. El problema es que, con la fragmentación del voto, ellos son necesarios para que gobierne la derecha. La derecha podría tomar muchas partes de su discurso y programa. Lo estamos viendo con el PP, que siempre ha sido de derecha; pero ahora trae un discurso muy extremo con su líder Casado. El apoyo que tendrán en Cataluña será muy pequeño, irrelevante. En el resto de España podría alcanzar entre el 6 y el 10%.

 

–En el contexto de la fragmentación del voto, ¿Vox podría ser el fiel de la balanza?

 

RG. – Sí eso es verdad. Podría influir. En Andalucía es lamentable, ya han tomado algunas medidas que dan vergüenza. Por ejemplo, van a paralizar toda la cuestión de la ley de la memoria histórica. ¿Sabe usted que España es el país que tiene más personas en fosas comunes, enterradas en cunetas, después de Camboya? Una lástima que México ya va en quinto o sexto lugar del mundo por la guerra contra el narcotráfico. Sin embargo, España es la segunda a nivel mundial. Hay más de 140 mil desaparecidos. Son de la época de la Guerra Civil y la dictadura franquista. Sabemos que están enterrados y más o menos dónde, pero no nos han dejado buscar ni enterrar. Vox quiere frenar todo porque ellos son los descendientes de las familias que mataron a nuestros abuelos.

 

– ¿España ya resolvió los problemas derivados de la crisis financiera mundial de hace diez años?

 

RG. – Parecía que en los últimos dos años había una recuperación; pero las expectativas de ahora no son buenas. Creo que no se han hecho los deberes. Lo que se hizo para salir de la crisis fue pagar la deuda de los bancos con dinero público; es decir, con el dinero de todos los españoles. Se saldaron los adeudos multimillonarios de la banca para que no cayera en la quiebra. Pero eso no fue la solución. Después siguió la misma economía de especulación, han vuelto a elevar los precios de la vivienda en las grandes ciudades como Madrid y Barcelona; sin embargo, no se han recuperado las condiciones labores que había hasta antes de la crisis. La precariedad laboral sigue siendo muy alta. Quizás bajó el desempleo, pero es un empleo malo. Por lo tanto, es muy probable que entre en recesión. Hay mucho empleo temporal. Lo que se debería hacer es promover la recuperación de la economía: del tejido industrial, agrícola. No se ha hecho. España y Cataluña, como México, son países ricos. 

 

– ¿No se aprendió la lección?

 

RG. – En mi opinión no.

 

– ¿Se han tomado previsiones?

 

RG. – No. La crisis pasó factura al gobierno socialista. Después llegó el PP. Y van ocho meses de un gobierno de izquierda que ha hecho alguna cosa, como subir el salario mínimo, lo cual es importante, pero no suficiente.

 

Relaciones México-Cataluña

 

La influencia de Cataluña en México ha sido muy importante desde la época de la Independencia, durante los siglos XIX, XX y lo que va del XXI, en ámbitos como el educativo, las ciencias, las artes, la economía, etcétera.

 

“Los catalanes somos muy simbióticos, nos adaptamos muy bien. No formamos muchos clanes como otras comunidades, como los gallegos y asturianos. Muchos catalanes han hecho cosas muy importantes en México empezando por Jaime Nunó que compuso la música del Himno Nacional Mexicano. O Arcadi Artís, un arquitecto que construyó la Sala Nezahualcóyotl”, explicó Giralt.

 

“Aquí estamos representadas tres generaciones del exilio”, resaltó González. “Rafael Vidal es nieto del exilio, Vicens Giralt llegó en los 80 no por exilio, sino por migración voluntaria y ahora en los años 2000, llegamos muchos, producto de la crisis económica que vive España, sobre todo, entre 2008 y 2014”.

 

Robert González calcula que la población de catalanes en México, a la fecha, es cercana a los 15 mil, con datos del Instituto de Estadística de Cataluña. De ellos, la mayoría, más de la mitad, viven en Ciudad de México (entre 8 y 9 mil), los demás se encuentran afincados en ciudades como Mérida, Puebla, Querétaro, Guadalajara, entre otras.

 

“Nos pasa como el portero del manicomio: cada vez que cierra la puerta dice que hay más locos afuera que adentro. Entonces, tenemos más catalanes que los registrados. No hay un conteo definitivo. Muchos de ellos ya son parientes y tienen descendencia” terció Vidal Anglès.

 

Por otro lado, González resalta la influencia mexicana en Cataluña: “Desde hace años, en el barrio de Gracia, en Barcelona, se celebra el Día de Muertos. No a raíz de la película Coco, sino desde hace como 15 años. Y una cosa que a mi generación nos marcó mucho fue el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Algunos que se dedican a la política como Anna Gabriel y David Fernández, se reivindican como ‘zapatistas catalanes’. Simpatizan con las ideas de la democracia horizontal, que los de arriba obedezcan a los de abajo, construir entre todas y todos, con o al margen de las instituciones; pero no contra ellas, en acompañamiento de la sociedad civil. Las ideas del zapatismo a quienes nos dedicamos al activismo, nos impactaron mucho”.

 

– ¿Qué otras actividades tienen programadas en la agenda la Comunidad Catalana en México?

 

RVA. – Luchamos por el bienestar de allá y de acá. Las cosas aquí no se ven fáciles, pero allá están complicadísimas. Hemos sido un pueblo al que han querido dominar desde siempre. Tenemos 300 años de dormir con el enemigo, en la época moderna, porque somos más antiguos que España. Si en España no les gusta que los catalanes hablemos catalán es seguramente porque fuimos invadidos. Tenemos el ánimo de conseguir la independencia de Cataluña, aun en la lejanía. El casal de México en muy importante para Cataluña porque aquí se escogió al president de la Generalitat en el exilio, el señor Josep Tarradellas.

 

VG. – Todas nuestras acciones tienen que ver con información y manifestaciones pacíficas. La Asociación Nacional Catalana (ANC) organiza conferencias con catedráticos catalanes o invitados. Hemos tenido el privilegio de tener al presidente Carles Puigdemont en el Orfeo Catalán; en video conferencia.   

 

Tenemos la idea de formar una república virtual, como en Lituania, donde todo mundo vota y paga sus impuestos por Internet.

 

Mientras Cataluña no pueda ser independente, estamos creando una república virtual.

 

 

 

https://www.alainet.org/es/articulo/198848
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