Juan Manuel Santos asume mañana el gobierno en un país donde los pueblos indígenas están al borde de la extinción física y cultural.

Hagamos posible el cambio

05/08/2010
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
-A +A
Juan Manuel Santos asume mañana, sábado 8 de agosto, el gobierno de Colombia. Una Colombia convulsionada, que arrastra una guerra que lleva ya más de cincuenta años. Y cuyas víctimas, como en todos nuestros países, son siempre los más excluidos, los invisibles, aquellos que solo figuran en las estadísticas como el “costo social” o los “daños colaterales”. En este caso, los pueblos indígenas colombianos, que están al borde de la extinción física y cultural.
 
Peligro de extinción por causa de ese conflicto armado interno, pero también por la imposición de un neoliberalismo brutal que invade territorios indígenas, saquea bienes naturales, depreda la Madre Tierra y criminaliza la protesta. Todo esto impulsado por el Estado y las empresas multinacionales que no dudan en formar o proteger a escuadrones paramilitares para proteger su modelo desarrollista.
 
¿Podemos esperar algún cambio con la salida de Álvaro Uribe, para quien las organizaciones indígenas del Abya Yala acordamos demandar un juicio internacional por genocidio (IV Cumbre Continental de Pueblos y Nacionalidades Indígenas, Puno, Perú, mayo del 2009)? Aunque hoy evidencian algunas discrepancias de estilo con quien le entregará el cargo, Juan Manuel Santos fue el candidato oficialista. Y como miembro del gabinete de ministros de Uribe, tiene responsabilidad en las acciones y omisiones del Estado colombiano contra los pueblos indígenas de este país.
 
Trayectoria de Santos
 
Juan Manuel Santos Calderón nació en Bogotá el 10 de agosto de 1951. Economista de profesión, tras desempeñarse como periodista incursionó a la política haciéndose miembro del Partido Liberal Colombiano y fue ministro de Comercio Exterior durante el gobierno de César Gaviria. Más tarde hizo parte del gobierno del conservador Andrés Pastrana Arango, en el que se desempeñó como Ministro de Hacienda. Tras la llegada de Álvaro Uribe a la presidencia en el 2002, Santos fue uno de los creadores del Partido de la U. Se desempeñó como Ministro de Defensa de Uribe desde julio de 2006 hasta mayo de 2009.
 
La familia Santos es una de las familias más influyentes en Colombia. Dos de sus miembros han hecho parte del gobierno de Álvaro Uribe Vélez: Francisco Santos Calderón es el saliente vicepresidente de la república y el propio Juan Manuel Santos, como ya dijimos, es ex-ministro de Defensa y el nuevo presidente para el periodo 2010 - 2014. Francisco y Juan Manuel son primos hermanos. La familia Santos es el segundo accionista mayoritario de la Casa Editorial El Tiempo, luego de que en 2007 vendieran el porcentaje mayor al Grupo Planeta.
 
En su paso por diversos partidos y gobiernos, hay que reconocer que Juan Manuel Santos supo mantenerse leal a una sola cosa: su neoliberalismo a ultranza.
 
Hagámoslo posible
 
Solo hay una manera de hacer posible un cambio en Colombia, pese al desmesurado e interesado apoyo del imperio norteamericano, que ha hecho de este país, junto con el Perú, los peones de su estrategia en Sudamérica. Y ese único camino es respaldar, hacer nuestra y participar en la campaña por la pervivencia y el respeto de los derechos de los pueblos indígenas colombianos.
 
Emplacemos al nuevo presidente colombiano, exijamos a los organismos de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos vinculados a los derechos humanos y los derechos de los pueblos indígenas que cumplan su papel de vigilar y sancionar al Estado colombiano, multipliquemos cartas y artículos de denuncia y opinión, hagamos plantones frente a las sedes diplomáticas colombianas en cada uno de nuestros países.
 
El 27 de julio pasado, Juan Manuel Santos visitó el Perú, donde la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (CAOI), que tiene su sede en Lima, le remitió una carta en la que le expresamos nuestra preocupación “por la dramática situación de los pueblos indígenas colombianos en peligro de extinción física y cultural, situación que ha sido reconocida a nivel interno por la Corte Constitucional y en el ámbito internacional por diversos organismos del sistema de las Naciones Unidas”.
 
“Esta situación –agrega la carta- es producto del conflicto interno que sufre Colombia, cuyos actores armados ocupan los territorios indígenas provocando enfrentamientos, así como de la incursión inconsulta de empresas extractivas en esos territorios. Ambos factores causan desplazamientos forzados, muertes, limitaciones para el libre tránsito, reclutamientos forzosos, entre otras muchas vulneraciones a los derechos humanos y colectivos de los derechos indígenas”.
 
Le dijimos a Santos que “hoy que está usted a punto de iniciar su gestión en la Presidencia de la República, le solicitamos que su gobierno tome en el plazo inmediato medidas efectivas para salvaguardar la pervivencia de los 102 pueblos indígenas, ciudadanos de su país que urgen de atención especial y cuyos derechos están amparados por instrumentos internacionales de los cuales Colombia es Estado parte, como el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo sobre Pueblos Indígenas y Tribales en Países Independientes”.
 
Finalmente, le pedimos: “Una primera acción en esa dirección sería el cumplimiento del Auto 004/009 de la Corte Constitucional de Colombia, que ordena al Estado elaborar Planes de Salvaguarda para 34 pueblos indígenas en peligro de extinción”.
 
Reiteramos cada una de esas palabras. Y demandamos a las organizaciones indígenas y del movimiento social del Abya Yala y el mundo que continuemos vigilantes y tomemos medidas efectivas para salvar la vida de los pueblos indígenas colombianos.
 
Lima, 6 de agosto de 2010.
 
Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas - CAOI
Bolivia, Ecuador, Perú, Colombia, Chile, Argentina
https://www.alainet.org/es/active/40249?language=es
Suscribirse a America Latina en Movimiento - RSS