Propuestas a los gobiernos

Seguridad y defensa nacional

04/12/2006
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  • Opinión
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Buenos Aires

Los movimientos sociales que confluimos en la Alianza Social Continental (ASC) y en las campañas continentales contra el ALCA, la deuda y la militarización, trabajamos, desde hace años, en formular propuestas alternativas al modelo neoliberal; por un lado y por otro, aunamos esfuerzos entre las organizaciones para establecer criterios comunes para la lucha y la resistencia al modelo de expoliación que pretenden imponer los Estados Unidos a los pueblos y países de la región.

Llevamos décadas en la lucha por la desmilitarización, contra las bases militares estadounidenses, y los ejercicios conjuntos comandados por el Comando Sur del Pentágono.  En este sentido, hemos adquirido un consenso social y político ente la opinión pública en general, y, en el mismo sentido, ante varios gobiernos que ahora escuchan las voces de los movimientos sociales.  Los cambios políticos en la región son producto de las luchas por un mundo mejor.

La II Cumbre de la Comunidad Sudamericana de Naciones (CSN) nos convoca nuevamente para elevar nuestras propuestas y críticas, con el fin de encontrar, en el camino democrático, las mejores políticas para los pueblos.

Los asuntos de la defensa y la seguridad en la región sudamericana son temas cruciales, y por ello, se deberán promover la mayor cantidad de consensos entre los países y encontrar los principios rectores que resguarden la integridad de las soberanías, los territorios, la autodeterminación de los pueblos y los recursos humanos, naturales y económicos de nuestros países.

Estos principios deberán estar pautados de tal forma que los países y gobiernos que se alejen de ellos puedan tener algún tipo de apercibimiento del resto de la Comunidad Sudamericana de Naciones. Los movimientos que hacemos estas propuestas entendemos la dificultad de establecer consensos en este nivel, sin embargo, nos comprometemos a ser celosos en el cumplimiento de los acuerdos y en señalar los desvíos y/o contradicciones que en el futuro puedan lesionar los inalienables intereses de los pueblos, incluido el derecho a su seguridad y soberanía.

Nuevos tiempos atraviesa nuestro Continente; convencidos de que somos protagonistas de ellos, asumimos que nuestro deber es también proponer políticas, desde la mirada de los movimientos sociales, que serán defendidas con las herramientas naturales que caracterizan a las organizaciones de la Alianza Social Continental.

Propuestas a la Comunidad Sudamericana de Naciones

Defensa y seguridad: políticas públicas

Los asuntos de la defensa y la seguridad serán de orden público.  Los gobiernos deben transparentar ante la ciudadanía las políticas sobre la materia; los debates sobre los marcos regulatorios y sus alcances serán también públicos. Los libros blancos de la defensa nacional se irán ajustando a los compromisos y principios asumidos por los gobiernos de la CSN; es necesaria la adecuación de los mismos a los futuros pactos internacionales regionales.

La publicidad de las políticas sobre defensa y seguridad será un punto de confianza mutua entre los países de la CSN.

Ejercicios conjuntos regionales y extra regionales

Los gobiernos asumen el compromiso de que los ejercicios conjuntos de las diferentes fuerzas armadas de la región no vulnerarán los principios y declaraciones asumidas por los gobiernos signatarios de la CSN. Las fuerzas armadas se ejercitarán mediante comandos conjuntos regionales.

Los ejercicios conjuntos con fuerzas armadas extra regionales tendrán que estar encuadrados en la agenda de seguridad, acordada en el marco de la CSN, y tendrán que asegurar el co-comando de los mismos.

Los ejercicios conjuntos con fuerzas extra regionales deberán estar establecidos en el marco de las hipótesis de conflicto consensuadas en la CSN.

La región se declara libre de conflictos interestatales; la paz es un hecho entre los pueblos hermanos.  Los ejercicios conjuntos con fuerzas extra regionales (es decir que no pertenezcan a América del Sur) deberán estar encuadrados en esta hipótesis. Los gobiernos que conciban acuerdos bilaterales con otras fuerzas armadas extra regionales, sean estos ejercicios reales o por medio de simuladores electrónicos, tendrán que comunicar los mismos al resto de las autoridades políticas de los países de la CSN.

Ingreso de tropas extra regionales a la CSN

El ingreso de tropas extranjeras y extra regionales deberá ser comunicado oportunamente a los gobiernos de la CSN.  Se buscará que el ingreso de tropas extra regionales esté encuadrado en la normativa internacional (Corte Penal Internacional).  Se establecerán consensos regionales que determinen que soldados que estén bajo acusación formal en cualquier país del mundo, de haber participado en torturas, crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra, no sean admitidos y no se les ofrezca ningún tipo de inmunidad legal.  El ingreso de tropas extranjeras a los países de la región se ajustará al marco legal de cada nación. Aspiramos al desmantelamiento de todas las bases militares extranjeras en los países de la CSN.

La defensa como cuestión política: consolidar la paz

La política de defensa será, entre los gobiernos signatarios de la CSN, una cuestión de carácter público. La región es declarada zona de paz. Será tarea de los gobiernos consolidarla.

Diferencias claras entre defensa y seguridad interior

Se procurará diferenciar las políticas inherentes a la defensa y a las de seguridad pública y ciudadana. Es común que la opinión pública confunda ambas esferas, cuando en realidad son de carácter distinto.

Correspondencia entre las políticas exteriores con las misiones de paz

La CSN como bloque político abogará por la paz mundial

En Sudamérica, al tener una verdadera situación de paz, en la que se busca resolver por medio de negociaciones las diferencias entre los Estados, las fuerzas armadas de la comunidad no participarán de misiones militares en teatros de operaciones bélicas extra continentales. Las misiones de paz, encuadradas y mandatadas por Naciones Unidas, tendrán que estar bajo el encuadre diferenciado entre los conceptos de defensa y seguridad.  Los gobiernos se comprometen a colaborar con sus fuerzas pertinentes de acuerdo al cuadro presentado por Naciones Unidas, no se enviarán fuerzas armadas para tareas de seguridad y viceversa.

No proliferación de armas de destrucción masiva

Los gobiernos de la CSN se comprometen a no ingresar a la región armas de destrucción masiva.

No al armamentismo

Los gobiernos de la CSN se comprometen a utilizar los mecanismos internacionales para evitar cualquier intento de carrera armamentista en la región. Las actualizaciones en el material bélico no serán de carácter secreto. Los gobiernos se comprometen a fortalecer la confianza, la paz y la seguridad regional.  Se pronunciarán en el sentido de que la región sea la que menos gasta en defensa en todo el mundo.

Esquema de nuevas amenazas

Se insta a los gobiernos a no aceptar la agenda de seguridad estadounidense para la región. Es de sentido común que Sudamérica no enfrenta las complejas amenazas y peligros enumerados en los esquemas de las llamadas amenazas no tradicionales y estructurales. En la región, no existe el fenómeno del terrorismo internacional.  Encontrar puntos comunes en la propia agenda regional de defensa coadyuvará a la paz y a la integración de las naciones sudamericanas.

Sobre la seguridad, los gobiernos elaborarán la agenda regional y establecerán públicamente los alcances de la cooperación interestatal.

Rina Bertaccini y Juan D. Roque son integrantes del Movimiento por la Paz, la Soberanía y la Solidaridad entre los Pueblos (MOPASSOL) de Argentina. Este texto es un extracto del documento “Seguridad, defensa nacional y militarización con vistas a Cochabamba, 2006”.


https://www.alainet.org/es/articulo/121265?language=es
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