El amigo americano
31/10/2003
- Opinión
Cuando en vísperas de la agresión a Irak, Harlan Ullman le
propuso a su jefe Rumsfeld, secretario de Defensa de Bush, el
concepto de "impacto y terror" para iniciar las operaciones de
castigo contra el pueblo iraquí, no sabía que su fórmula sería
copiada por Bob Zoellick para aplicarla a la guerra comercial
que Estados Unidos lleva a cabo en diversos lugares del
planeta.
Ullman, miembro del Centro de Estudios Estratégicos y hombre
de confianza de Rumsfeld, recomendó lanzar en pocas horas un
ataque selectivo y demoledor sobre puntos estratégicos de
Irak, cuyo impacto ocasionaría el terror generalizado entre la
población y la caída del régimen iraquí. Impacto y terror se
concibió así como el binomio destinado a matar y con el horror
de la muerte extender rápidamente el pánico y la rendición.
La estrategia comercial de la Administración Bush está
supeditada a la dominación militar y económica de los Estados
Unidos, tal como reza en el Proyecto para el Nuevo Siglo
Americano(PNAC), convertido tras el golpe de Estado fáctico
que llevó a Bush al poder, en la política oficial
estadounidense. Todos los miembros fundadores y firmantes de
las declaraciones del PNAC, controlan hoy el gobierno de los
Estados Unidos. Zoellick es "uno de los nuestros", dijo la
Administración cuando defendió su nombramiento en la
secretaría de Comercio. Es un equipo ultraderechista con pocas
fisuras en su seno; como en los tiempos de Monroe o de
Theodore Roosevelt, creen fervientemente que el mundo es para
los americanos, y que el destino manifiesto necesita del gran
garrote.
Así que cuando Zoellick llegó a Zapote e irrumpió en el
despacho del presidente Abel Pacheco, con la amenaza de que si
Costa Rica no se retiraba del G-20 constituido en la cumbre de
Cancún y no privatizaba sus telecomunicaciones quedaba fuera
del TLC, fue como si hubiera arrojado la madre de todas las
bombas, para desatar inmediatamente una campaña de guerra
psicológica, dirigida a provocar el miedo y la pronta
rendición.
Asistimos desde entonces a una campaña feroz que pretende
descalificar y aislar mediante el insulto y la manipulación a
los diversos sectores sociales del país que expresan críticas
al TLC, mientras se elogia sin mesura las supuestas bondades
de un tratado cuyo texto permanece escondido y se anuncia una
catástrofe nacional si Costa Rica no cede a las presiones del
gobierno de Bush.. Se trata de una política de intimidación y
chantaje que busca quebrar las posiciones del Estado y de la
sociedad costarricense en temas clave como telecomunicaciones,
energía, agua, seguros, finanzas, hidrocarburos, producción de
alcohol, salud, educación, agricultura y biodiversidad, y
radicalizar las políticas neoliberales de privatización,
liberalización y desregulación de nuestra economía y nuestros
recursos, incluidas las funciones del Estado democrático en
cuanto a sus responsabilidades frente a las necesidades de
desarrollo soberano de la nación.
Paul Kennedy, historiador y profesor emérito de la
Universidad de Yale, comentaba que un reciente sondeo del
Proyecto Pew de Tendencias Globales, con una muestra de 38 mil
personas en 44 países y 16 mil entrevistas en 20 países,
colocaba a Bush como la persona más impopular de la Tierra.
"El sondeo es asombroso--concluía Kennedy-- porque mide el
espantoso alcance del miedo y el odio que inspira la
Administración Bush en todo el mundo".(El País, España,
19/6/2003). La Directora del Informe sobre Desarrollo Humano
2003 de la ONU, Sakiko Fukuda, y el economista de la
Universidad de Columbia, Jeffrey Sachs, publicaban también un
artículo conjunto en el que denuncian cómo la globalización se
ha convertido en un "bastión de los ricos", y critican
duramente las políticas egoístas de los países ricos, en la
que destacan el caso de los Estados Unidos, donde la ayuda
proporcionada a los países pobres es la más baja de todo el
mundo donante en función de sus ingresos, el 0.1% del Producto
Interno Bruto.(El País, España, 6/8/2003).
Sirvan las referencias anteriores para ilustrar la catadura
del gobierno con el que ¿se negocia?, un tratado de libre
comercio. Y hablamos del gobierno y no del pueblo
estadounidense. Detrás del TLC están las transnacionales.
Precisamente la política de Bush ha llenado de dinero los
bolsillos de los más ricos, y ha batido las marcas de pobreza,
desempleo, déficit y gasto militar de las últimas
administraciones.
¿Con quién estamos negociando entonces? Lo aclaró el mismo
Zoellick el pasado 16 de mayo, en un discurso ante el
Instituto de Economía Internacional de Washington: "Negociar
un TLC con Estados Unidos no es algo a lo que alguien tiene
derecho, es un privilegio". Para la selección de un socio,
dijo el virrey del comercio, se toma en cuenta su colaboración
con la política exterior y las metas de seguridad de los
Estados Unidos, su posición en la OMC y en el ALCA. Hasta un
"moderado" de la administración Bush, como el secretario de
Estado Colin Powel, señala abiertamente que el objetivo "es
garantizar a las empresas norteamericanas el control de un
territorio que va del polo ártico hasta la Antártica, libre
acceso, sin ningún obstáculo o dificultad, para nuestros
productos, servicios, tecnología y capital en todo el
hemisferio".(Citado por Osvaldo León, "Movilización
continental contra el ALCA", htpp://alainet.org , 24 de enero
de 2002).
Tras el fracaso de Cancún, donde los países ricos se negaron a
terminar con el régimen de subsidios a sus agricultores, que
asciende a mil millones de dólares diarios, los Estados Unidos
han sido todavía más claros en señalar que es lo que esperan
de un TLC con Centroamérica. El objetivo estratégico es
apuntalar su hegemonía en todo el Continente, pero ante la
emergencia de un nuevo bloque regional latioamericano liderado
por Brasil que opone serios obstáculos al ALCA, la táctica es
intensificar las presiones y los acuerdos bilaterales con
países pequeños y débiles, con los que se puede utilizar los
recursos financieros, políticos, económicos y de seguridad,
para asegurar en escala nacional y regional, lo que todavía
parece lejano a nivel continental. Es la aplicación del
unilateralismo agresivo que el imperialismo norteamericano
pone en práctica en todos los ámbitos de la vida
internacional. La huída de los espacios multilaterales, para
agarrar por el cuello, uno a uno, a gobiernos que en todo caso
son proclives al vasallaje. Así han jugado, por ejemplo, en
relación con la Corte Penal Internacional, rechazando el
acuerdo multilateral y asegurándose después acuerdos
bilaterales que conceden a los estadounidenses inmunidad e
impunidad ante acusaciones de crímenes contra la Humanidad.
"El CAFTA(tlc por sus siglas en inglés) es la base de algo
mucho más importante", ha dicho Zoellick. Negocian con los más
débiles para crear situaciones de hecho que permitan, luego,
romper la resistencia de los más fuertes.
Como era de esperar, después de haber apoyado la invasión a
Irak y presionar a la Asamblea Legislativa para que apruebe la
instalación de la academia policial de Estados Unidos en Costa
Rica, el gobierno de Pacheco empezó a comportarse como
administración de "república bananera" saliéndose
inmediatamente del G-20, que apenas es un modesto pero
significativo intento de proteger a los agricultores de los
países pobres. También el presidente Pacheco comenzó a recular
de su posición inicial en el tema del ICE, y ya aceptó que
podría negociarse algún tipo de apertura en
telecomunicaciones. En realidad las negociaciones están en las
manos de un grupo con una trayectoria más cercana a los
intereses de las trasnacionales estadounidenses que a los de
Costa Rica, el colmo de la desvergüenza es que son los propios
norteamericanos los que financian buena parte de los gastos
del equipo negociador de nuestro país, tal como se puso de
manifiesto al revelarse las andanzas financieras de la
fundación Costa Rica- USA.
La visita de Zoellick al país no fue fortuita. Llegó cuando ya
se había fraguado un acuerdo con sectores de nuestra
oligarquía político-empresarial, para trazar una estrategia
que les permita revertir la derrota que sufrieron con el
Combo. No es una casualidad que la campaña de guerra
psicológica se iniciara inmediatamente, una campaña bien
orquestada y lujosamente financiada. La ofensiva la inició el
oligopolio mediático del periódico La Nación, que convirtió la
libertad de prensa en libertad de empresa y libertad de
difamación, acompañado de las cúpulas de las cámaras
empresariales y del expresidente Oscar Arias, que puso su
Nobel de la Paz al servicio de este neoliberalismo de guerra.
Norman Birnbaum, profesor emérito de la Universidad de
Georgetown, escribía recientemente que Washington se vale de
siervos menguados para imponer su nuevo totalitarismo:" Se
incita a la oponión pública a que rechace a los que critican
al imperio, a los que se califica práctica o auténticcamente
de traidores(..:). Las subvenciones de la CIA a intelectuales,
burócratas, propagandistas y políticos en "el mundo libre"
ascienden a miles de millones de dólares".(El País, España,
31/8-2003). Un destacado funcionario estadounidense le dijo al
economista Faux, también estadounidense: "Lo que usted tiene
que entender es que nosotros negociamos con personas que
pertenecen a las clases altas de aquellos países que comparten
con nosotros gran número de intereses económicos y
políticos".( Faux: Rethinking the Global Political Economy,
EPI, 2002).
Eso es lo que debemos entender: los ricos de Estados Unidos
negocian con los ricos de Costa Rica. Los perdedores siempre
serán así los mismos: los trabajadores, los campesinos, los
pequeños y medianos productores, la gente que vive honrada y
duramente de su trabajo.
Funciona en Costa Rica una telaraña de intereses neoliberales
que liga a políticos, empresarios, economistas , dueños de
medios de comunicación, cámaras, centros ideológicos y
fundaciones , en una especie de infraestado o estado paralelo,
que mantiene relaciones carnales con los centros de poder del
imperio, que reciben recursos cuantiosos y que son los
escuadrones de Zoellick para desacreditar y machacar no sólo a
los sindicatos, a cualquier costarricense por cuyas venas
corra la sangre de Juanito Mora y no la de William Walker.
A pesar de que los apologistas del TLC no pueden explicar
cuáles son los beneficios netos que obtendría el país,
insisten en una política del miedo presentando un escenario
catastrofista si no cedemos a las presiones de los Estados
Unidos. La Coalición de Iniciativas para el Desarrollo(CINDE)
dice que sin TLC podríamos quedar tan aislados como Cuba(La
Nación, 13/10/2003); es decir, que este influyente grupo de
presión de las transnacionales, anuncia que Costa Rica podría
sufrir la política criminal de embargo y bloqueo padecida por
Cuba en los últimos cuarenta años, nos amenazan así con la
política del gran garrote, demostrando que el imperio no
quiere ni necesita amigos, sólo vasallos.
Esta campaña infame de la ultraderecha indigna y levanta el
sentimiento patriótico de la mayoría de nuestro pueblo. Desde
los sectores populares que conformamos la mayoría social de
Costa Rica, hemos ido construyendo un proyecto del país en el
que queremos vivir y que estamos dispuestos a defender. Decía
Martí que "trincheras de ideas valen más que trincheras de
piedras", ellos tienen la fuerza del dinero y de las armas que
las usan sin escrúpulos ante cualquier disidencia o rebeldía,
nosotros tenemos la fuerza de la razón y de las convicciones.
Los derrotamos en las jornadas luminosas del Combo, podemos
vencer de nuevo al gigante de las siete leguas, si somos
capaces de marchar unidos y de andar, como quería el Apóstol,
en cuadro apretado, como la plata en las raíces de los Andes.
La diversidad de posiciones críticas hacia el TLC, lejos de
ser un problema puede convertirse en la riqueza de una
oposición plural que se unifique alrededor de unas
reivindicaciones democráticas básicas y de unos ejes centrales
que definan la Costa Rica que queremos.
Es necesario insistir en la denuncia del secretirmo con que se
llevan a cabo las negociaciones, y exigir la publicación del
texto íntegro en discusión. La llamada cláusula de
confidencialidad impuesta por el gobierno de los Estados
Unidos, y aceptada por los gobiernos de Centroamérica, es
democrática y éticamente inadmisible. También es repudiable
que las negociaciones sigan secuestradas por un equipo que
recibe financiación estadounidense y que no representa la
pluralidad democrática de la sociedad costarricense.Como dice
el expresidente Rodrigo Carazo "a lo largo de nuestra historia
patria jamás un Gobierno, una Asamblea Legislativa e incluso
una Asamblea Nacional Constituyente, tuvo en sus manos la
potestad de modificar tan profunda y radicalmente la
naturaleza de nuestro Estado Nacional y la administración de
justicia".
No debemos aceptar que se le pongan fechas límites y
perentorias al TLC. Está claro que la Administración Bush fija
el mes de diciembre para cerrar la negociación y firmar,
preocupada por el desarrollo de una campaña electoral en
Estados Unidos que aumentará las críticas a las consecuencias
de un libre comercio a la medida de las transnacionales. No
debemos dejarnos atropellar. Apoyar una moratoria, es ganar
tiempo para la información, el debate y la movilización de
nuestro pueblo.
Debe intensificarse la presión sobre el Gobierno para que no
entregue los intereses del país, y sobre la Asamblea
Legislativa para que los diputados y diputadas sientan que la
ciudadanía está despierta y vigilante, exigiendo que el
parlamento cumpla su papel democrático de controlar las
acciones del Ejecutivo, de abrirse al conocimiento y a la
participación, y no limitarse al papel de simple convidado de
piedra.
Es necesario distinguir entre sectores nacionales que tienen
dudas y temores legítimos sobre las consecuencias de no firmar
el TLC, y la camarilla neoliberal que con TLC o sin TLC
siempre defenderán el desmantelamiento del Estado Social y
pondrán sus negocios por encima de los intereses del país y de
las mayorías. Con los primeros hay que establecer canales de
diálogo, a los segundos hay que desnudarlos como el grupo de
poder que en los últimos años ha estado detrás de las
políticas neoliberales y de la corrupción, son los mismos que
siempre han querido robarse el ICE y asaltar el patrimonio
nacional.
Las enormes reservar intelectuales y morales que hay en
nuestra sociedad debemos ponerlas en movimiento. Desde los
sectores populares se han generado documentos valiosísimos,
que no se limitan a criticar con rigor el libre comercio
neoliberal y las experiencias de los TLCs, sino que también
presentan alternativas fundamentadas en el comercio justo y
nuevos estilos de desarrollo que nos permitan abatir la
pobreza y construir un país justo y próspero. Si el
neoliberalismo tiene a sus intelectuales orgánicos, las
fuerzas populares y de la cultura deben articular una alianza
necesaria y urgente para levantar las ideas de la resistencia
y de la alternativa. Como en los días del Combo, hay que poner
en marcha una red eficaz de comunicación, información, debate;
hay que llegar a los colegios, universidades, barrios, centros
de trabajo, para que se escuchen nuestras posiciones y recibir
las inquietudes y propuestas de los y las costarricenses.
Finalmente, la democracia cuando es secuestrada y mancillada
debe recuperarse y palpitar en la calle, ahí nació y ahí se
recupera y vigoriza cada vez que es traicionada. La
desobediciencia civil, pacífica y democrática, es una
herramienta de la lucha de los pueblos cuando los canales
institucionales formales son bloqueados o dinamitados por
poderes oligárquicos extrademocráticos y extranacionales. La
unidad en la acción de las fuerzas de la soberanía nacional y
de la democracia, debe expresarse en la lucha de ideas y en
potentes manifestaciones populares en las calles.
* José Merino del Río es coordinador del Foro de Acción
Política "Otra Costa Rica es posible, otro mundo es posible".
https://www.alainet.org/es/active/4903?language=es
Del mismo autor
- ¿Por qué Chávez? 04/10/2012
- Crónica de unas elecciones 29/09/2010
- La izquierda necesaria 17/12/2009
- Desde abajo, desde la izquierda 22/01/2009
- Sobre la renegociación del TLC 18/11/2008
- La crisis no es solo un momento de destrucción y declive 27/07/2008
- Despenalizan la tala ilegal en áreas de protección 22/05/2008
- No al miedo, si a la paz y a la justicia 17/05/2008
- El gobierno pretende eliminar el derecho humano de acceso al agua 07/05/2008
- Tiran confite a los bomberos, mientras otros apañan piñata del INS 28/04/2008