Ecuador: Salto al vacío
12/01/2000
- Opinión
Dolarización: Una medida desesperada
Presionado por los diversos frentes para que presente su renuncia, el domingo
9 de enero el presidente Jamil Mahuad se dirigió al país para anunciar la
dolarización de la economía ecuatoriana, sobre la base de una paridad
cambiaria de 25 mil sucres por cada dólar, si bien que tan solo tres días
antes había descartado esta medida señalado que "sería como un salto al
vacío".
Si bien durante su intervención el mandatario resaltó en varias oportunidades
que había optado por la dolarización basado en los estudios que el régimen
habría realizado en el curso de los dos últimos meses, los analistas
coinciden en señalar que se trata de una acción desesperada para evitar su
caída. Por lo pronto ha logrado un virtual pacto con las élites, quienes no
solo han moderado sus recriminaciones sino que han salido a la arena pública
a defender la medida, configurándose un nuevo escenario donde el tema central
del debate es la dolarización y ya no la destitución de Mahuad.
Como parte del proceso, el presidente anunció que enviará al parlamento un
paquete de medidas complementarias que básicamente apuntan a intensificar el
modelo neoliberal, tales como la flexibilización laboral, las privatizaciones
de las empresas públicas y de la seguridad social. Para su aprobación cuenta
ahora con la alianza explícita del oficialismo (Democracia Popular) con el
Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE), liderado por el ex-presidente Abdalá
Bucaram, y el entendimiento implícito con el derechista Partido Social
Cristiano (PSC).
El otro ingrediente que Mahuad se encargó de dejar en claro es que las
Fuerzas Armadas y la Policía, al amparo del estado de emergencia nacional
decretado el 5 de enero, se ocuparán de poner orden ante las acciones de
protesta que a lo largo del país se vienen desarrollando desde inicios de
año, y que podrían intensificarse en los próximos días en rechazo a la
dolarización.
Parlamento de los Pueblos
Con un llamado a la desobediencia civil y al levantamiento indigena-popular
para refundar un nuevo país, "libre de corrupción, solidario, económicamente
activo y descentralizado", el martes 11 de enero se instaló el Parlamento
Nacional de los Pueblos del Ecuador en el teatro de la Escuela Politécnica
Nacional, con la participación de más de tres cientos parlamentarios/as
delegados/as de 21 provincias del país y la concurrencia de mil doscientos
representantes de las organizaciones sociales e indígenas.
Bajo la Presidencia de Monseñor Alberto Luna Tobar, el Parlamento ratificó la
voluntad de los pueblos del Ecuador de luchar por la revocatoria del mandato
del Gobierno presidido por Jamil Mahuad, del Congreso Nacional y la
disolución de la Corte Suprema de Justicia, a fin de dar paso "a la auténtica
democracia y a una economía soberana y productiva, aún con mayor razón, una
vez anunciada la dolarización". Esta medida, que Monseñor Alberto Luna la
calificó como "pecado contra el pueblo", fue condenada por el Parlamento en
pleno. Por otra parte, el Obispo ratificó, el carácter democrático del
Parlamento Nacional de los Pueblos del Ecuador y se refirió al proceso como
la única alternativa para que sea el pueblo el que conduzca su destino.
La conformación de este Parlamento hace parte del proceso de lucha impulsado
por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) y la
Coordinadora de Movimientos Sociales (CMS), de cara a la creación de una
nueva República de los pueblos del Ecuador.
En su intervención, el presidente de la Conaie, Antonio Vargas, declaró que
el Parlamento Nacional de los Pueblos del Ecuador condenó el pacto perverso
de la vieja clase política con los banqueros y empresarios corruptos quienes
ahora se unen nuevamente con el Gobierno de Mahuad para defender sus
intereses en contra del pueblo, por lo que se hace urgente un cambio total y
el levantamiento indígena-popular.
El Parlamento Nacional de los Pueblos del Ecuador, además resolvió, suspender
inmediatamente el salvataje bancario y recuperar los fondos de los banqueros
corruptos disponiendo la incautación de su patrimonio, así como descongelar
inmediatamente los fondos de los depositantes. La propuesta económica se
basa en una economía solidaria y la no privatización del patrimonio de los
ecuatorianos, mediante una estrategia que priorice la reactivación del
aparato productivo y la coexistencia de los sectores públicos, privados y
comunitarios en la economía nacional, exigiendo a la iniciativa privada
responsabilidad social ética y ambiental y al sector público transformaciones
mediante una Ley de Empresas Públicas que permitan la despolitización y la
eficiencia.
Los mecanismos para el control de la inflación, el incentivo del ahorro
interno, la canalización de créditos para la producción, y el castigo a la
especulación también fueron discutidos. En el capítulo de la deuda externa,
el Parlamento resolvió la moratoria provisional y renegociación de la deuda
externa, compatible con el logro de los objetivos y la recuperación económica
productiva.
El Parlamento Nacional de los Pueblos del Ecuador así como los Parlamentos
provinciales y cantonales y Parlamentos de las Nacionalidades y de los
Pueblos indígenas del Ecuador, funcionarán permanentemente en todo el país,
ejerciendo una real democracia y el poder soberano del pueblo.
Texto del Mandato del Parlamento
de los Pueblos del Ecuador para la Salvación Nacional
Presionado por los diversos frentes para que presente su renuncia, el domingo
9 de enero el presidente Jamil Mahuad se dirigió al país para anunciar la
dolarización de la economía ecuatoriana, sobre la base de una paridad
cambiaria de 25 mil sucres por cada dólar, si bien que tan solo tres días
antes había descartado esta medida señalado que "sería como un salto al
vacío".
Si bien durante su intervención el mandatario resaltó en varias oportunidades
que había optado por la dolarización basado en los estudios que el régimen
habría realizado en el curso de los dos últimos meses, los analistas
coinciden en señalar que se trata de una acción desesperada para evitar su
caída. Por lo pronto ha logrado un virtual pacto con las élites, quienes no
solo han moderado sus recriminaciones sino que han salido a la arena pública
a defender la medida, configurándose un nuevo escenario donde el tema central
del debate es la dolarización y ya no la destitución de Mahuad.
Como parte del proceso, el presidente anunció que enviará al parlamento un
paquete de medidas complementarias que básicamente apuntan a intensificar el
modelo neoliberal, tales como la flexibilización laboral, las privatizaciones
de las empresas públicas y de la seguridad social. Para su aprobación cuenta
ahora con la alianza explícita del oficialismo (Democracia Popular) con el
Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE), liderado por el ex-presidente Abdalá
Bucaram, y el entendimiento implícito con el derechista Partido Social
Cristiano (PSC).
El otro ingrediente que Mahuad se encargó de dejar en claro es que las
Fuerzas Armadas y la Policía, al amparo del estado de emergencia nacional
decretado el 5 de enero, se ocuparán de poner orden ante las acciones de
protesta que a lo largo del país se vienen desarrollando desde inicios de
año, y que podrían intensificarse en los próximos días en rechazo a la
dolarización.
Parlamento de los Pueblos
Con un llamado a la desobediencia civil y al levantamiento indigena-popular
para refundar un nuevo país, "libre de corrupción, solidario, económicamente
activo y descentralizado", el martes 11 de enero se instaló el Parlamento
Nacional de los Pueblos del Ecuador en el teatro de la Escuela Politécnica
Nacional, con la participación de más de tres cientos parlamentarios/as
delegados/as de 21 provincias del país y la concurrencia de mil doscientos
representantes de las organizaciones sociales e indígenas.
Bajo la Presidencia de Monseñor Alberto Luna Tobar, el Parlamento ratificó la
voluntad de los pueblos del Ecuador de luchar por la revocatoria del mandato
del Gobierno presidido por Jamil Mahuad, del Congreso Nacional y la
disolución de la Corte Suprema de Justicia, a fin de dar paso "a la auténtica
democracia y a una economía soberana y productiva, aún con mayor razón, una
vez anunciada la dolarización". Esta medida, que Monseñor Alberto Luna la
calificó como "pecado contra el pueblo", fue condenada por el Parlamento en
pleno. Por otra parte, el Obispo ratificó, el carácter democrático del
Parlamento Nacional de los Pueblos del Ecuador y se refirió al proceso como
la única alternativa para que sea el pueblo el que conduzca su destino.
La conformación de este Parlamento hace parte del proceso de lucha impulsado
por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) y la
Coordinadora de Movimientos Sociales (CMS), de cara a la creación de una
nueva República de los pueblos del Ecuador.
En su intervención, el presidente de la Conaie, Antonio Vargas, declaró que
el Parlamento Nacional de los Pueblos del Ecuador condenó el pacto perverso
de la vieja clase política con los banqueros y empresarios corruptos quienes
ahora se unen nuevamente con el Gobierno de Mahuad para defender sus
intereses en contra del pueblo, por lo que se hace urgente un cambio total y
el levantamiento indígena-popular.
El Parlamento Nacional de los Pueblos del Ecuador, además resolvió, suspender
inmediatamente el salvataje bancario y recuperar los fondos de los banqueros
corruptos disponiendo la incautación de su patrimonio, así como descongelar
inmediatamente los fondos de los depositantes. La propuesta económica se
basa en una economía solidaria y la no privatización del patrimonio de los
ecuatorianos, mediante una estrategia que priorice la reactivación del
aparato productivo y la coexistencia de los sectores públicos, privados y
comunitarios en la economía nacional, exigiendo a la iniciativa privada
responsabilidad social ética y ambiental y al sector público transformaciones
mediante una Ley de Empresas Públicas que permitan la despolitización y la
eficiencia.
Los mecanismos para el control de la inflación, el incentivo del ahorro
interno, la canalización de créditos para la producción, y el castigo a la
especulación también fueron discutidos. En el capítulo de la deuda externa,
el Parlamento resolvió la moratoria provisional y renegociación de la deuda
externa, compatible con el logro de los objetivos y la recuperación económica
productiva.
El Parlamento Nacional de los Pueblos del Ecuador así como los Parlamentos
provinciales y cantonales y Parlamentos de las Nacionalidades y de los
Pueblos indígenas del Ecuador, funcionarán permanentemente en todo el país,
ejerciendo una real democracia y el poder soberano del pueblo.
Texto del Mandato del Parlamento
de los Pueblos del Ecuador para la Salvación Nacional
https://www.alainet.org/es/articulo/104532?language=es
