Eventos que muestran “debilidad” de EEUU en el frente caribeño

Jesús Dávila

16/03/2014

Opinión

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SAN JUAN, Puerto Rico, 17 de marzo de 2014 (NCM) – Mientras barcos de Canadá, Inglaterra, Holanda y Rusia han visto acción en la lucha por enfrentar los contrabandistas en el Caribe este año en unión a las fuerzas regionales, Estados Unidos sólo ha aportado algunos escampavías y un barco viejo, en tanto que en puntos focales de tensión la posición estadounidense es promovida más por entidades de tipo privado.

En cambio, la actividad militar de EEUU se ha concentrado en inteligencia y las llamadas “operaciones de información”, los entrenamientos y la promoción de que sus aliados en la zona se encarguen cada vez más de la protección de su frontera artificial en el noreste del Caribe, a pesar de que se reconoce que se trata de un punto muy vulnerable y que la Operación MARTILLO –anti drogas- va rumbo a una derrota.

Los señalamientos se desprenden del análisis de treinta eventos militares ocurridos en la región caribeña y en torno a ella desde que comenzó el año 2014, así como de documentos oficiales, despachos militares y otros informes –todos públicos- recopilados por NCM Noticias. La revisión fue motivada por el anuncio hecho por el gobierno autonomista de Puerto Rico de que las fuerzas armadas de EEUU decidieron poner fin a su participación en el llamado “Escudo Costero”, que desde mediados de 2013 ya se advertía que no contaba con recursos para cumplir ni siquiera el cincuenta por ciento del plan.

Como suele suceder, los eventos militares no cuadran siempre con ideologías, discursos y doctrinas que los bandos esgrimen para consumo público, sino que son marcados más por los movimientos en que se confrontan fuerzas y debilidades.

Así por ejemplo, en el frente principal contra los narcotraficantes resultó estar Venezuela, cuyas fuerzas armadas se habían incautado de cerca de ocho toneladas de drogas ya para febrero, además de realizar las maniobras VENTRI 2014 en conjunto con Trinidad-Tobago. Compartían el lugar principal Colombia y Panamá, que realizaron cinco capturas en la zona marítima que comparten y en el archipiélago de San Andrés, próximo al área de operaciones del patrullaje conjunto de Nicaragua y Rusia, que esta temporada comenzó el primero de enero y se debe extender hasta el verano.

En 2013, Rusia aportó servicios de inteligencia a Nicaragua para una serie de capturas de contrabandistas en zonas fronterizas y a finales de enero de este año llegó al Caribe el buque Viktor Leonov, CCB-175, de la inteligencia naval rusa. La nave, con pequeños cañones de 35 milímetros y misiles, pero principalmente armada con radares y equipos de vigilancia electrónica, permaneció en Cuarcao los últimos días de enero reabasteciéndose de combustible y descansando para luego zarpar a sus operaciones en el Caribe.

A finales de febrero, el barco “espía” ruso hizo otra escala de varios días, pero esta vez en el puerto de La Habana, lo que fue motivo de algunas voces de alarma en EEUU debido a la proximidad de Cuba con la península de la Florida. De hecho, la Federación Rusa ha dejado saber que está en búsqueda de bases en la zona del Caribe para que sus aviones de reconocimiento hagan escalas y puedan vigilar mejor a EEUU.

Pero en específico, lo que se ha anunciado es el próximo establecimiento de un centro de adiestramiento para la lucha contra el contrabando de drogas a ubicarse en Nicaragua con ayuda rusa.

El único barco de la armada de EEUU del que se ha hablado en la zona es el USS Halyburton, construido en 1980 y en turno para decomisarse este año. La nave tuvo participación destacada en las acciones de la zona de operación colombo-panameña.

En el norte del Caribe, el barco auxiliar británico Wave Knight, con un helicóptero de los guardacostas de EEUU, realizó varias capturas en las aguas cercanas a Jamaica y República Dominicana. Además, en las islas Bahamas, las fuerzas de ese país en unión a un helicóptero de EEUU hicieron una captura importante y la Guardia Costanera estadounidense hizo dos capturas más al norte y al sur del Canal de la Mona, que separa República Dominicana de Puerto Rico.

Poco después un barco holandés recogía otro helicóptero de la Guardia Costanera de EEUU en Cayo Hueso y entraban en acción dos barcos más de Inglaterra, que al momento del cierre de esta crónica ya se encontraban patrullando, uno al sur de Jamaica y otro en aguas al oeste de las Antillas Menores, en tanto que Canadá ha aportado cuatro barcos más.

El general John F. Kelly, jefe del Comando Sur de EEUU, informó que mientras hace algún tiempo con la Operación MARTILLO se incautaron 240 toneladas de droga al año, en 2013 sólo se capturaron 132 y la entrada de drogas a EEUU aumentó en 20 toneladas entre 2012 y 2013. El general Kelly advirtió además que la construcción de fincas de molinos de viento está poniendo en peligro los radares sobre el horizonte de Texas y Virginia –con los que se vigila el Caribe y América del Sur- aunque no se refirió al radar de Puerto Rico, que se supone cumple la misma tarea y también tiene ahora fincas de molinos cercanas.

“Los objetivos originales de la Operación MARTILLO podrían no ser ya alcanzables”, dijo el general.

Cálculos independientes indican que mientras en 2009 EEUU aportó 154,8 millones de dólares al Caribe para fuerzas militares y policiales, al presente esa cantidad se ha reducido a 36,5 millones.

Las prioridades están en otro lado.

Justo cuando llegaba a Curacao el Viktor Leonov, en República Dominicana se reunía una conferencia militar regional auspiciada por el Comando Sur de EEUU en la que se discutía el internet como recurso para labores de inteligencia y la expansión de los Centros de Operaciones Conjuntas de Inteligencia (JIOC). Mientras tanto, el general Kelly le ha dado realce a la exportación de servicios de seguridad por parte de Colombia, país donde está documentada la participación de empresas mercenarias estadounidenses.

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