Refundar Haití con el programa boliviariano

19/02/2010
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
-A +A
Haiti se encuentra viviendo una tragedia de contornos inimaginables con 217 mil muertos comprobados debido al terremoto que azotó esta isla nacion caribeña sólo hace pocas semanas atrás.
 
Los países ALBA han decidido enviar toda clase de recursos alimenticios y humanos en el campo de la medicina para aliviar a los hermanos haitianos que sufren cada dia hambre y sed en medio de enfermedades que pudieran volverse epidemias de alcance nacional.
 
Bolivia como parte de los países ALBA ha enviado medicinas, sangre y alimentos, pero por primera vez también 50 médicos bolivianos están cumpliendo una misión internacional al estilo de las clásicas y heoroicas ayudas internacionalistas a las que Cuba ( otro país miembre de ALBA ) nos tiene acostumbrados en este continente pero tambnién en África, Asia y El Caribe menos desarrollado. Tambien Bolivia aporta con soldados a las órdenes de la ONU para tareas de rescate y provisión de alimentos en forma ordenada.
 
Venezuela Bolivariana está aportando junto a Ecuador y Nicaragua ayuda humanitaria, petróleo y alimentos. Esta ayuda es parte de las obligaciones internacionalistas insertas en el espíritu bolivariano que anima a los países ALBA.
 
Los países ALBA como parte de UNASUR están apoyando la formación de un fondo financiero o aporte al desarrollo de hasta 300 millones de dólares, pero también están exigiendo que se restablezca la institucionalidad haitiana para que sean los propios haitianos los que administren las ayudas recibidas desde los cinco continentes.   
 
Sin embargo Haiti necesita en realidad más ayuda integral y ante todo y por sobretodo una verdadera refundación de la nación sobre la base de una nueva constitución que tenga espíritu bolivariano, es decir que permita a Haiti unirse al desarrollo integrador que le pueda ofrecer la estructura de ALBA y UNASUR.
 
Haiti por si solo no avanzará hacia adelante y hacia el progreso sostenible y la industrializació n acelerada de su propia nación a los que tiene derecho pleno 
 
Haiti necesita de la integración solidaria y sostenida  que debe ser ofrecida por los países ALBA con inversiones y transferencia de tecnologías y un plan de seguridad alimentaria y seguridad energética.
 
Haiti puede convertirse en un gran productor de alimentos, lácteos, cereales y carnes. Y no solamemte para su propio consumo sino que también para la exportación hacia otros países como Cuba, Nicaragua y Venezuela Bolivariana y otros países caribeños.
 
Sólo ncesita Haiti que los dirigentes de esta nación independiente desde 1804, empiecen a planificar su economia en forma integral y a organizar su población en tareas de producción, salud y construcción de viviendas.
 
Las tropas yankis tendrán que salir de Haiti porque no están autorizadas por la ONU y porque los nuevos líderes así lo reclamarán de la comunidad internacional. Se debe demostrar que Haiti y su pueblo puede y debe ser un país moderno, sostenible económicamenmte y sin enfermedades públicas evidentes.
 
Ejemplo para Haiti es el proceso popular en Bolivia que busca la producción y seguridad alimentaria con tecnologías endógenas, apropiadas, pero también importadas y de punta. Todo este paquete tecnológico se lo puede dar y transferir desde los países ALBA e inclusive desde los países UNASUR en su conjunto.
 
Para Argentina enseñar a criar vacas lecheras y cultivar especies como cebadas y trigo para alimento animal y humano no es un problema grande. Los bolivianos pueden transferir genética y variedades de papa y quinua. Los ecuatorianos pueden enseñar a producir amaranto. Los venezolanos a planificar la economía energética y generar potencia energética renovable y no renovable. Los nicas conocen de la producción de alimentos y carnes en abundancia. Los países caribeños de ALBA pueden aportar en turismo e inversiones hoteleras. Cuba puede aportar todo desde médicos hasta gerentes de planificación sustentable del desarrollo integral. Brasil tiene un desarrollo gigantesco en la producción de carnes y biocombustibles en base a especies no comestibles como la jatata, macororó y totai tropical.
 
Se trata de poner en funcionamiento el espíritu de integración que comenzó con Simón Bolivar y Petion, cuando a principios del siglo XIX los haitianos apoyaron la gesta bolivariana con barcos, armas y dinero.
 
!!! Es hora de devolver a los hermanos haitianos su aporte al espíritu integracionista del continente latinoindoamericano !!!.
 
https://www.alainet.org/es/active/36267
Suscribirse a America Latina en Movimiento - RSS