Colombia: la hostilidad conveniente
- Análisis
Hace un par de años todas nuestras explicaciones sobre los extraños fenómenos que observamos en la economía tenían que ver con Colombia. En especial, con las reglas de cambio que rigen en aquel país y su uso para hacer del Bolívar una mercancía barata.[1] En esa época, vimos imágenes de helicópteros que sobrevolaban la frontera dejando al descubierto las trochas por donde salía todo lo que en Venezuela pudiese haber y como alimentaba las farmacias, las tiendas y el extremadamente informal comercio de gasolina colombiano.[2]
¿Lo recuerdan? Incluso por esa época hubo encuentros diplomáticos de varios cancilleres venezolanos con María Ángela Holguín Cuéllar[3] e incluso una reunión entre Maduro y Santos[4] que no lograron convencer a los colombianos de corregir ninguna de las cosas que se habían desviado.
Por el contrario, mes a mes, hemos visto crecer la hostilidad colombiana que sin dejar de proseguir en las acciones en contra de la moneda o de alimentar su mercado de productos venezolanos ha venido variando su espectro.
Así comenzaba el 2016, con tomas desde el puente Simón Bolívar con unas primeras tomas para abrir el tema del canal humanitario. La gente, mientras que se viera mucha, no importaba si era colombiana o venezolana o parte de la comunidad que habita entre ambos países. No importaba si iban de visita, de compras o emigraban. Eran muchos y de eso iba la historia.
En esta pequeña crónica queremos ver tan sólo lo que han sido actos oficiales o al menos actuaciones de sus máximas autoridades, por lo que hemos decidido dejar fuera las recurrentes amenazas que el Senador y ex Presidente Álvaro Uribe Vélez suele hacer en contra de Venezuela.
Por eso, queremos recordar el capítulo ocurrido el pasado mes de noviembre de 2017, cuando Colombia ordenó revertir las compras de medicina contra la malaria que había hecho Caracas a un proveedor neogranadino, actuando como si estuviese en vigencia en Colombia, alguno de los decretos que han prohibido el comercio entre Estados Unidos y Venezuela.
Así lo reseñó la prensa en aquél momento:
El Presidente Juan Manuel Santos ordenó recientemente a BSN Medical Colombia, laboratorio que produce Primaquina -medicamento que se utiliza para el tratamiento del Paludismo- rechazar la compra del Estado venezolano de ese fármaco esencial para tratar y curar la malaria.
Tareck El Aissami, Vicepresidente de Venezuela, denunció el pasado jueves que para el alivio del pueblo venezolano ya estaba garantizada la Primaquina pues el medicamento fue comprado al Gobierno de la India y empezó a ser distribuido en el Estado Bolívar el viernes 3 de noviembre.[5]
Esta compañía, BSN Medical Colombia, es una trasnacional importante con centros de producción en Alemania, Francia, Reino Unido, Méjico, Pakistán, Sudáfrica, Colombia, Venezuela, Nueva Zelanda y Estados Unidos; operando en todo el mundo a través de filiales, sociedades y agentes distribuidores, y comercializa varios productos comunes en el mercado de la salud como Leukopor®, Tensoplast®, Gypsona®, JOBST®, Delta-cast® y Actimove® [6]
La vacunación contra la malaria es sumamente importante porque esta enfermedad es considerada por la Organización Mundial de la Salud como una enfermedad prevenible y curable, lo que no le quita ser una enfermedad potencialmente mortal.[7]
Por lo cual, debe atacarse mediante procesos masivos de vacunación:
La lucha antivectorial es el medio principal de reducir la transmisión del paludismo. Si la cobertura de las intervenciones de esta índole es suficiente en una zona determinada, se protegerá a toda la comunidad.
La OMS recomienda proteger a todas las personas expuestas a contraer la enfermedad mediante medidas eficaces de lucha antivectorial. Para el control efectivo del vector, recomienda proteger a toda la población que se encuentra en riesgo de infectarse. Hay dos métodos de lucha contra los vectores que son eficaces en circunstancias muy diversas: los mosquiteros tratados con insecticidas y la fumigación de interiores con insecticidas de acción residual.[8]
Ante esta decisión de Bogotá, el país se vio obligado a buscar nuevos proveedores que trajeron las medicinas de más lejos, de la India específicamente, habiendo perdido el tiempo destinado a la negociación y es posible pensar que esto generó un impacto financiero del cual no se ha hablado públicamente.
“Está despegando a primera hora de la mañana un avión de la India que trae este medicamento para el pueblo de Venezuela. Ya hemos garantizado la primaquina (…) estamos trayendo este medicamento para garantizarle la atención necesaria al pueblo del estado Bolívar que es uno de los pueblos más golpeados por esta epidemia de la malaria y el paludismo”[9]
Con el año nuevo, las actitudes en contra de Caracas no han hecho sino definirse cada vez de manera más clara. Dirigiéndose a apoyar la constitución de un gobierno paralelo –o en el exilio- donde pudimos observar que fue el Senado de Colombia el que sirvió de escenario para el fingido proceso contra el Presidente Nicolás Maduro y sobretodo se han enfocado en realizar negociaciones a nombre de Venezuela, aceptando planes económicos extranjeros que Caracas ha declarado, firmemente y desde hace al menos dieciocho años, descartar.
Así, es Colombia el país que de manera protagónica está solicitando y recibiendo ayuda internacional para “atender” a los migrantes venezolanos. En estos términos lo expresó Juan Manuel Santos el 13 de febrero de este año:
El presidente Juan Manuel Santos reconoció este martes que la situación seguirá agravándose y que el país necesita de la ayuda de otros Estados para poder atender la crisis a nivel social y económico que, inevitablemente, producirá la alta migración venezolana.
Santos, durante un saludo al cuerpo diplomático acreditado en Colombia -en la Casa de Nariño-, aseguró que su Gobierno está abierto a aceptar “las ofertas de ayudas económicas y de otra índole de la comunidad internacional, estamos en plena disposición de recibirlas, ya que las necesitamos pues infortunadamente este problema se agrava día por día”. No obstante, aún no se hacen públicas las cuantías que se requieren.[10]
Lo que ocurrió poco después porque el 20 de marzo fue noticia que, en los términos del diario Tal cual, que “EEUU envía ayuda económica a Colombia para atender a migrantes venezolanos”, por un compromiso inicial e inmediato de 2,5 millones de dólares proveerá alimentación de emergencia y asistencia de salud para venezolanos vulnerables y las comunidades colombianas que los están recibiendo”.[11]
Sin embargo, estos ingresos no han significado que a los venezolanos les sean garantizadas buenas condiciones de acogida en Colombia puesto que siguen siendo rechazados, fichados ante la policía y maltratados según reportaba Madelein García para Telesur el 15 de abril de este año.[12]
Así, parece que la hostilidad de los mandatarios colombianos en relación a la Revolución Bolivariana comienza a generar, más allá de las ventajas para el control político en Colombia una dimensión económica que no puede ser más descarada. Incluso, puede ser considerada una abierta agresión en contra de nuestra soberanía cuando llegamos a lo que ocurrió este 19 de abril cuando el ministro de Hacienda de Colombia, Mauricio Cárdenas, anunció una propuesta en el FMI de rescate financiero a Venezuela de 60.000 millones de dólares para “estabilización macroeconómica”, que se aplicaría cuando haya un Gobierno dispuesto a tomar las “políticas económicas correctas”.[13]
Puede que alguna revisión más a fondo permita conseguir precedentes de una falta de respeto tan profunda para una Nación soberana. Debo confesar que al momento en el que cierro esta nota, no los conozco porque además de demostrar la clara voluntad de Colombia de incidir en las decisiones económicas y políticas de nuestro país busca forzar un compromiso económico sobre bienes nacionales de manera inconsulta en el país que vería hipotecado su futuro. Eso, por demás que significa aplicar desde afuera el plan de gobierno que cada vez que ha sido presentado en Venezuela, desde 1998 ha sido derrotado en las urnas.
Cerrando ya este recuento, ordenado, de acciones que desde Bogotá se han tomado que significan actuar u omitir para exprimir económicamente a Venezuela incluimos una noticia publicada el día de ayer en la sección de economía de Elestimulo.com titulada “EEUU y Colombia crean grupo para perseguir redes de corruptos venezolanos”[14], lo cual parecía referirse a otros temas hasta que se advierte que la red busca en específico dedicarse a asuntos relacionados con la comida que conforma las cajas del Clap.
Señala el texto:
“…En una reunión celebrada el jueves en Washington, Estados Unidos y otros 15 países anunciaron la investigación del programas de importación de alimentos que impulsa el chavismo en Venezuela, que abarcaría el Clap.
Para el director de esta Unidad, Juan Francisco Espinosa, este “es un nuevo reto para la entidad que se suma a todas las líneas de investigación financiera adelantadas con los Estados Unidos”.
La presunta justificación de esta medida es la que debe convertirse en un alerta para nosotros puesto que en esta reunión donde participó Mauricio Cárdenas –el que pidió al Fondo Monetario dinero para Venezuela- sostuvo Espinosa quien dirige la unidad que “de manera conjunta con el Tesoro revelamos una presunta red de corrupción que genera sobrecostos a un programa humanitario en Venezuela, algo que va en detrimento del bienestar de sus ciudadanos”.
Ninguna persona en Venezuela creerá que existe un sobreprecio en los bienes que se comercializan por medio del programa de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).
Por ello, poco arrojará esa investigación más que generar un escándalo en contra de funcionarios venezolanos que puedan insertarse en la nueva excusa continental: la lucha contra la corrupción, y, nada parece más evidente que las acciones anteriores que hicieron para corroer la economía y el bienestar de los venezolanos incluirán ahora una sistemática persecución del programa bandera para aminorar los efectos del “chillido de la economía” que nos han venido imponiendo. Esperemos que lo sepamos advertir a tiempo.
Notas
[1] http://www.laiguana.tv/articulos/14075-mundo-contrabando-colombia-resolucion-nro-8-conflicto-frontera-venezuela
[2] https://www.telesurtv.net/news/Venezuela-halla-177-trochas-para-el-contrabando-en-la-frontera-20150903-0049.html
[3] http://www.cancilleria.gov.co/en/newsroom/news/conozca-las-declaraciones-y-comunicados-prensa-cancilleria-sobre-situacion-frontera
[4] http://www.elmundo.es/internacional/2016/08/11/57abb131ca47413c118b464d.html
[5] http://www.colombiainforma.info/santos-bloquea-venta-de-medicamentos-a-venezuela/
[6] http://www.bsnmedical.com.co/acerca-de-bsn-medical.html
[7] http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs094/es/
[9] http://rnv.gob.ve/en-las-proximas-horas-llegara-a-venezuela-medicamentos-para-la-malaria/
[10] https://www.semana.com/nacion/articulo/colombia-recibe-ayuda-internacional-para-atender-crisis-migratoria-de-venezolanos/557062
[11] http://talcualdigital.com/index.php/2018/03/20/eeuu-envia-ayuda-economica-a-colombia-para-atender-a-migrantes-venezolanos/
[12] https://twitter.com/madeleintlSUR/status/985635866319179777
[13] https://www.efe.com/efe/america/economia/colombia-propone-en-el-fmi-un-plan-de-rescate-a-venezuela-60-000-millones-dolares/20000011-3589823
[14] http://elestimulo.com/elinteres/eeuu-y-colombia-crean-grupo-para-perseguir-redes-de-corruptos-venezolanos/
Fuente: https://anicrisbracho.wordpress.com/2018/04/23/colombia-la-hostilidad-conveniente/
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