Indigna la amenaza de Estados Unidos

Salvador González Briceño

12/03/2015

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Rinde frutos. Múltiples reacciones de solidaridad. De ciudadanos, de analistas, de líderes, de medios, de países, de asociaciones, de grupos de países, de jóvenes, etcétera. La indignante calificación de Venezuela como “amenaza” para la seguridad nacional de Estados Unidos (EU), del presidente Barack Obama, ha unificado fuerzas. Todas en su contra.

Deja entrever —decíamos antes [ver: “Obama amenaza Latinoamérica”], en este mismo portal)—, que tras la derrota de la política exterior de guerra en los diversos escenarios del mundo, EU vuelve la mirada hacia el “patio trasero”. Como intentando retornar a la belicosidad de pasado yanqui en la región, causando golpes militares, asalto contra gobiernos “enemigos”, amenazas, invasiones, saqueos, muerte de campesinos, guerra de baja intensidad, bases militares, entrenamientos, venta de armas, control de drogas, espionaje, etc. etc.

Pero las respuestas de solidaridad con Venezuela dejan ver que no. Que así como el presidente Obama se equivocó en otros escenarios, acá la ocurrirá igual: perderá cualquier tipo de acción contra Nicolás Maduro, o el pueblo venezolano. Casi seguro que Obama no se esperaba esto. Que haría de las suyas, como lo pretende con frecuencia, pero se le revierte siempre. Porque Obama es un presidente sin brújula, mejor dicho, fallido. Le ha incumplido a los demócratas, a los republicanos, a su pueblo, al mundo con el Nobel de la Paz (es más “presidente de guerra”).

Ahora Latinoamérica no es la de los “espejitos”. Tampoco la incomunicada, como sucedía en los años 70 y 80 con la prensa. Ahora toda la información corre a la velocidad de la luz. Y así surgió el rechazo al imperio decadente de EU, a su líder. Así también la preparación como respuesta: los “poderes especiales” que le otorga la Asamblea Nacional de Venezuela a Maduro, para “defender la patria” bolivariana, a su país y el petróleo.

Lo han dicho Insulza, Correa, Cristina, China. Por mencionar algunos. El Secretario General de la OEA, José Manuel de Insulza, que: “preocupan más los términos utilizados por Obama contra Venezuela que las sanciones”, y llamó al organismo a analizar el conflicto con un “espíritu constructivo”.

El presidente ecuatoriano Rafael Correa, ha anunciado que el próximo jueves los cancilleres de la Unasur se reunirán en Montevideo para preparar una cumbre presidencial del grupo, en la que se dará una respuesta a la "injerencia" de EE.UU. sobre Venezuela.

Por cierto que no por la superioridad militar o de estrategias, ni la derrota del fascismo alemán. Simplemente porque no le tocó padecer la guerra en carne propia, e hizo negocios con todo: reconstrucción, rearme, energía atómica, carrera armamentista posterior, etcétera.

El gran Voltaire habría escrito: “Estoy en desacuerdo con lo que dices, pero defenderé hasta la muerte tu derecho a decirlo”.

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