El levantamiento patriótico campesino y popular contra el gobierno neoliberal y centralista del APRA y Alan García Pérez, se inicio en el Perú teniendo énfasis en el sur, centro y oriente del Perú.

Este 8 de julio, primer día del Paro Nacional Agrario está haciendo ver sus fuerzas la Confederación Campesina del Perú (CCP), por que en la Región Puno las bases campesinas comunales a diversos pistas carreteros y carreteras han bloqueado y trancado con piedras, reforzando estas acciones con mítines en muchas capitales de distritos y provincias. Esta medida de protesta no ha permitido el normal recurrido de vehículos motorizados de turistas, pasajeros y carga de Cusco a Juliaca, Puno y Arequipa.

Similar situación ha sido en la Región Cusco, donde la carretera Cusco-Abancay que va hasta Lima está trancado con piedras y árboles, impidiendo el tránsito de cientos de unidades vehiculares motorizados de pasajeros y carga. Los campesinos cerraron el Paro Nacional Agrario con un mitin en la Plaza Huaqaypata de la ciudad del Cusco.

En el centro del Perú (Región Huancavelica), se ha producido una movilización de las comunidades campesinas que realizaron una manifestación en la plaza de armas de la ciudad de Huancavelica, capital de dicha región. De igual forma en la Región Ancash, las comunidades campesinas trancaron la pista carretero que une la ciudad de Ancash y el Callejón de Huaylas con Lima.

En la amazonia (oriente-selva) del Perú, los productores agrarios y campesinos, con diversas formas de acción acatan el Paro Nacional Agrario, en Puerto Maldonado de la Región Madre de Dios, han averiado la filial de Radio Programas del Perú, uno de los voceros principales del gobierno aprista, del gran capital, neoliberalismo y de las empresas transnacionales, mientras en Yurimaguas de la Región Loreto, los campesinos han bloqueado el transporte fluvial del Río Ucayali y han tomado el mercado de abastos. En Pucallpa de la Región Ucayali, los campesinos han bloqueado por completo la carretera Federico Basadre que va de la ciudad de Pucallpa a Lima.

Las medidas de fuerza de las comunidades campesinas, productores agrarios y campesinos es contra los decretos legislativos 1015 (privatización de tierras comunales a través de la inversión privada), 1064 que entrega potestad de explotación de yacimientos mineros a empresas mineras transnacionales quitando el derecho de diálogo empresa minera-comunidad campesina, 1081 que podrá entregar el agua de riego y dulce en administración a empresas transnacionales y 1083 que crea la Autoridad Autónoma de los Recursos Hídricos. Dicho de otra manera, con esta medida de lucha, los campesinos rechazan al gobierno del APRA y Alan García Pérez.

Cabe destacar que en el Paro Nacional Agrario, participa de manera activa la Confederación Nacional Agraria (CNA), etc. La CCP es base de la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP).

Se estima que el 9 de julio, el Paro Nacional Popular convocado por la CGTP con el apoyo de la Coordinadora Político y Social y Frentes de Defensa de los Intereses de los Pueblos; será contundente debido que ingresarán a la paralización los trabajadores sindicalizados, comerciantes minoristas de los mercados, calles y tiendas, trabajadores no sindicalizados, campesinos y productores agrarios. En esta dirección se encuentra el sentido común de los ciudadanos y ciudadanas.

El Paro Nacional Popular, exige al gobierno aprista; el cambio de política económica, trabajo con derechos dignos universales, derogatoria de los decretos legislativos 1015, 1064, 1081, 1083 Y 1073 que atentan contra las comunidades campesinas, comunidades nativas y productores agrarios. Este paro demanda que salgan del Perú las bases militares y tropas de los Estados Unidos de Norteamérica y el rechazo de los TLC, principalmente del TLC Perú-Estados Unidos. El petitorio de los ejecutores del Paro Nacional Popular, tiene vasto contenido de demandas que tiene que resolver el gobierno del APRA y Alan García Pérez.

Antes de iniciarse las acciones del Paro Nacional Agrario y Paro Nacional Popular, se ha evidenciado con nitidez la reapertura de la crisis política neoliberal, por lo que el gobierno del APRA y Alan García Pérez; por evitar que se le escape el poder político de sus manos ha recorrido a las Fuerzas Armadas del Perú, autorizando a que intervengan apoyando a la Policía Nacional del Perú para “brindar seguridad” los días 8 al 10 de julio de 2008.

La intervención de los militares de los cuarteles en las medidas de lucha del 8 y 9 de julio, ha recibido rechazos contundentes de organizaciones políticas, analistas políticos, defensoría del pueblo, CGTP y de los pueblos del Perú. La actitud del gobierno nacional, ciertamente es dictatorial.