Llama la atención que en voz del titular de la Secretaría de Gobernación (Segob) del país, Miguel Ángel Osorio Chong, se asegure que México “no está en llamas”.

 En las últimas semanas se ha registrado la desaparición de más de diez personas en el municipio de Chilapa, en Guerrero –sin contar a los 43 estudiantes normalistas, igualmente desaparecidos desde septiembre de 2014 por efectivos policiales de la región--.

También, el registro del asesinato de dos candidatos a cargos de elección popular, uno en Michoacán y el otro en Tabasco, con síntomas de que sus agresores respondían a asuntos relacionados a la presente contienda electoral en nuestro país.

En Jalisco, una primera versión oficial situó la caída “por emergencia” de una aeronave de la Secretaría de la Defensa Nacional, sin embargo, tras un trabajo periodístico reveló que el derribo del helicóptero cobró la vida de un grupo de soldados de élite, conocido como GAFE, por parte de un grupo de la delincuencia organizada.

No menos importante, se registró la fallida puesta en órbita de un satélite mexicano, que en términos coloquiales no servía para mucho, ya que las autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) han dicho que sus tareas serán suplidas por otro satélite que será puesto en órbita en próximos meses.

 Pero lo más interesante del asunto, es que el propio Osorio Chong, el encargado de la política interna del país, haya evitado hacer algún comentario sobre el escándalo en el que está ubicado el (hasta hoy) consejo presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, donde se mofa de un grupo indígena.

“Jefe supremo” del INE se burla de indígenas

El dardo cayó de forma efectiva y provocó lo que se requería, exhibir a la máxima autoridad electoral en México, previo a una discusión sobre si uno de los partidos políticos mantendrá su registro tras constantes sanciones.

Lorenzo Córdova de manera concreta hace referencia a una reunión que sostuvo con Mauricio Mata Soria, jefe supremo de la tribu Chichimeca de Guanajuato, la cual en abril pasado solicitó la intervención de la autoridad a fin de mantener un distrito en su región y poder tener una representación en el Congreso de la Unión.

 Cierto, la constancia se obtuvo --al parecer-- de manera ilegal. Sin embargo, la imagen de un funcionario público de “honorables” calidad de un árbitro electoral quedó cuestionada para siempre, sin contar con la manchada que provocó a la de su padre, Arnaldo Córdova.

Pero volvemos a la pregunta de origen, por qué calló el titular de la Segob, Miguel Ángel Osorio Chong, en este tema que pone en riesgo, incluso los resultados de las próximas elecciones en todo el país.

José Víctor Rodríguez Nájera

Periodista mexicano / @JoseVictor_Rdz