El ALBA y la década afrodescendiente

28/10/2012
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Hay varias deudas pendientes de los gobiernos progresistas de “nuestra América” que se desprendieron del IV Encuentro Afrodescendientes y Transformaciones Revolucionarias en América Latina y el Caribe realizado  el mes de junio del 2011 en la ciudad de Caracas. Este foro generó algunas expectativas cumpliéndose algunas como la presencia afro por primera vez en el décimo octavo Foro de Sao Pablo, el pasado mes de julio y anteriormente la inclusión en el plan de Acción de la Comunidad Latinoamericana y del Caribe (CELAC-2011) reconociendo la solidaridad hacia Haití, así como la reafirmación de los aportes políticos de las y los africanos y sus descendientes en nuestros procesos libertario.
 
Una historia de fondo para un fondo
 
A lo largo del siglo XX las y los afrodescendientes emprenderían duras luchas para su reconocimiento e inclusión en las políticas públicas de los Estados de las Américas y el Caribe con un alto costo de vidas humanas, desestructuración psicológicas, encarcelamientos, entre otras aberraciones causadas por el neoliberalismo salvaje marcada por la llamada década perdida de los años ochenta de ese convulsionado siglo.
 
A finales del siglo XX, se comienza a operar, en el contexto de la Democracia Burguesa representativa, una serie de cambios donde se exigía respeto a nuestras soberanías, mayor distribución de las riquezas e inclusión de los sectores marginados por el modelo capitalista neoliberal. Surge en Venezuela a partir de 1998, la propuesta del proceso Bolivariano, que un año más tarde en 1999, cambiaría su Constitución de democracia representativa a Democracia participativa y que el estado Venezolano fuese un estado Plural. Se plantea que la integración la hacen los pueblos, de ahí que se derrota el proyecto económico liberal AREA DE COMERCIO LIBRE DE LAS AMERICAS (ALCA) que pretendía entregar nuestros países a las 120 compañías más avaras del continente. Es ahí como aperturamos el Siglo XXI, con otra visión de la integración y la reafirmación antiimperialista. En el año 2001, en el marco de la III Cumbre de jefes de Estados y de Gobierno de la Asociación de Estados del Caribe, nacería la ALTERNATIVA BOLIVARIANA PARA LA AMERICA (ALBA). Una vez la idea de una nueva independencia estaría naciendo en el Caribe como ya había sucedido en el siglo XIX, donde nuestra independencia se había ido entretejiendo entre Jamaica, Trinidad, Haití y el Caribe Venezolano.
 
Pero aún así el Alba desde su creación, en el 2001, no había reconocido los aportes de las y los afrodescendientes como elementos protagónicos de los proceso de cambios ocurridos en más de cinco siglos de luchas. A penas el 25 de junio del año 2010 en Otavalo, Ecuador, en una reunión de sobre autoridades indígenas y afrodescendientes es que se va a reconocer la presencia afro en el ALBA y Tratado de los pueblos. Sin embargo es bueno destacar que países como Honduras, antes del golpe contra el presidente Manuel Celaya, las comunidades afrohondureñas habían avanzado en un proceso de desarrollo sustentable con el Alba. Esta experiencia fue ahogada a sangre y fuego y daría surgimiento a la llamada afroderecha que nació con la Cumbre de Honduras guiada por Hilary Clinton en agosto del año pasado. La experiencia afrohondureña en tiempo del presidente Celaya nos sirvió de referente importante para expresar la necesidad de crear un FONDO AFRODESCENDIENTE DEL ALBA-TP que permita en una forma equitativa distribuir los recursos del Alba desde la etnocomprensión e inclusión de las comunidades afrodescendientes que constituyen estos países y se hiciera extensiva hacia las comunidades afrodescendientes de aquellos países que no lo integran.
 
Un fondo con fondo para iniciar el Decenio Afrodescendientes
 
Es por ello que el Movimiento social afrovenezolano en consulta con los movimientos sociales afrodescendientes de los países del Alba sometieron  a  consideración en el IV Encuentro afrodescendientes del año 2011 esta propuesta que se resume en:
 
La creación de un Fondo que permita la captación de recursos para promover, desarrollar e implementar, programas y proyectos para el desarrollo de las comunidades afrodescendientes que forman parte del Alba, así como la articulación con comunidades afrodescendientes de países hermanos del Caribe y Latinoamérica que así lo exigieran en función de erradicar la pobreza y estimular a la austostenibilidad en las áreas de economía, desarrollo social, salud, genero, cultura, comunicación, educación, agricultura sustentable y no contamínate, y ambiente.
 
Los programas y proyectos dirigidos hacías las comunidades afrodescendientes de los países del ALBA y países vecino, se enmarcan en los principios de la integración, la cooperación la solidaridad, siendo los mismo compartidos en la estrategia de proyectos GRANNACIONAL en las áreas mencionadas en el artículo 1 para la libre circulación de los productos y experiencias concretas de los países involucrados..
 
Es hora de que los gobiernos en consenso con los movimientos sociales afro de Venezuela, Ecuador, Cuba, Nicaragua, Bolivia inicien de una vez por todas la puesta en práctica de esta propuesta como proyecto concreto para iniciar el Decenio de las y los afrodescendientes que arrancara el año próximo y es conexo en el aspecto internacional del proyecto Simón Bolívar (2013-2019).
https://www.alainet.org/de/node/162190
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