Sentido fallecimiento de Juan Almeida Bosque, Comandante de la Revolución

12/09/2009
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El pasado 12 de septiembre tuvimos conocimiento de una triste noticia. El Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y la Dirección del Estado informó de la muerte, el día 11 a las 23,30, hora cubana, del Comandante de la Revolución Juan Almeida Bosque.
 
Nacido en La Habana el 17 de febrero de 1927, se incorporó a la lucha contra la tiranía tras el golpe de Estado del 10 de marzo de 1952. En 1953 fue uno de los asaltantes al cuartel Moncada. Detenido durante la acción, junto a no pocos de sus compañeros, fue encarcelado en la prisión de Isla de Pinos, actual Isla de la Juventud. Amnistiados todos los moncadistas presos, debido la presión ejercida por el pueblo contra el tirano, viajó a México, desde donde, el 2 de diciembre de 1956 regresó a Cuba a bordo del yate Granma con el objetivo cumplido de derrocar a Fulgencio Batista, presidente títere al servicio del imperialismo yanqui.
 
El 28 de mayo de 1957 y con grado de capitán, fue herido en el conocido combate de El Uvero. El 27 de febrero de 1958 fue ascendido a Comandante del Ejército Rebelde y, después, nombrado jefe del III Frente Oriental Mario Muñoz Monroy, del que fue fundador y en cuyo Mausoleo, en fecha aún por determinar, serán inhumados sus restos mortales.
 
Triunfada la Revolución, durante la invasión mercenaria de Playa Larga y Playa Girón, el Comandante en Jefe lo situó al frente de las provincias centrales. Debido a sus méritos y a su indiscutible capacidad como dirigente, el Comandante fallecido ocupó numerosos cargos a lo largo de más de cincuenta años: fue jefe de la fuerza aérea, viceministro de las FAR, diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular, vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, miembro del Comité Central y del Buró Político del Partido Comunista de Cuba –PCC- y presidió la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana –ACRC-. Igualmente, fue merecedor del Título Honorífico de Héroe de la República de Cuba, así como de la Orden Máximo Gómez de primer grado, entre otras condecoraciones.
 
El del compañero Almeida ha sido un fallecimiento muy sentido, tanto dentro como fuera de la Isla. Ahora mismo, en el momento en que escribo estas líneas, el pueblo cubano está inmerso en un Duelo Oficial –de 8 de la mañana a 8 de la noche del domingo día 13- como reconocimiento y homenaje al Comandante que inevitablemente se nos fue, pero con el pleno convencimiento de que “¡Aquí no se rinde nadie!” y quedándose para siempre en el corazón de su gente, en la memoria viva de su pueblo.
 
- Paco Azanza Telletxiki, http://baraguá.wordpress.com
https://www.alainet.org/de/node/136316?language=es
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