De un tiempo para acá, la izquierda mexicana se había convertido en una mezcolanza, en un revoltijo, en un amasijo, en algo amorfo y sin sentido, seguramente como se ha acusado porque el Partido de la Revolución Democrática, que la aglutina, está formado por una serie de “tribus”, que al no ponerse de acuerdo en asuntos vitales, han retrasado el papel que debería de jugar en el contexto político del país. Sin embargo, ahora parece, al desechar alianzas con corrientes absolutamente contrarias y encontradas, que el PRD entra en la necesaria etapa de su purificación ideológica.

No es la primera vez que nos referimos al tema. Siempre habíamos criticado que por el sólo el hecho de ganar posiciones políticas y obtener puestos de elección popular, el PRD hizo alianzas o mejor dicho tranzó con lo exactamente opuesto, es decir con la derecha o con la ultraderecha representada por el Partido Acción Nacional, que ahora de nuevo y controversialmente vuelve a gobernar al país a costa de la cuando menos discutida derrota de su líder histórico, Andrés Manuel López Obrador.

Es por consecuencia, que toma especial relevancia la decisión del Consejo Nacional del Partido de la Revolución Democrática, que la calificaríamos de fundamental para el futuro del mismo, el desechar la nominación como su candidata al Gobierno de Yucatán de la ex panista, pero eso sí muy yunquista, Ana Rosa Payán Cervera.

Según los argumentos, hoy ya corregidos, por el presidente del PRD, Leonel Cota Montaño por cierto ex priísta que llegó a la gubernatura del estado de Baja California Sur por el arropamiento que le dio en su momento el partido de la izquierda, al postular a la Payán ganarían votos y posiblemente le arrebatarían el gobierno maya a la derecha de la casta divina.

Esas alianzas le han costado todo al Partido de la Revolución Democrática, cuando menos su distorsión ante la ciudadanía sufragante que lo ha considerado traidor a su ideología y luego haber sufrido en carne propia el mismo tratamiento, la traición de aquellos que llegados al poder les voltearon la espalda. Valga un ejemplo, ese monstruo rapaz del sureste, el degobernador de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchía, el perseguidor número uno de los periodistas.

Que bueno que Cota Montaño haya reculado y ahora declare lo que todos sabíamos, que las alianzas con panistas le han costado mucho, diríamos que todo al Partido de la Revolución Democrática. Para que les duela más a la derecha a ultranza y al yunquismo, afirmamos que con tal decisión se inició la purificación del PRD.

En otro tema. Como ocurre en nuestro México, ahora los colegas de Brasil están de luto. El reportero gráfico Róbson Barbosa Bezerra, de 41 años, fue asesinado por esbirros de ocho impactos de bala a las puertas de su casa en el barrio Abolicao, suburbio de la zona norte de Río de Janeiro, Brasil.

El grave episodio, que enluta al periodismo latinoamericano, ocurrió la noche del último jueves pasado. El compañero trabajaba como reportero free lance en distintos diarios de Río de Janeiro. Las evidencias señalan que el asesinato tiene vinculación con su labor profesional ya que Barboza Bezerra había presentado días atrás una denuncia por amenazas, agresión y lesión corporal, por lo que había una investigación abierta.

Desde aquí nuestras condolencias a sus familiares, amigos y a los colegas brasileños. Nuestro repudió a tales crímenes y nuestra exigencia a las autoridades del país hermano, en nuestra condición de vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP-México, porque se esclarezca de inmediato el homicidio y los culpables sean llevados ante la justicia.


- Teodoro Rentería Arróyave es periodista y escritor mexicano, vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP.

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