Otra de la NSA

Néstor García Iturbe

03/06/2014

Opinión

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En una serie de artículos que escribimos recientemente calificamos a Estados Unidos como un Estado Policiaco y además explicamos el porqué de dicha calificación.

En esos artículos expusimos los distintos métodos y controles que se han creado para recopilar información y controlar la vida privada de los ciudadanos estadounidenses, al igual que la de ciudadanos de otros países.

El Gendarme Internacional no reconoce fronteras ni respeta soberanías, considera que tiene derecho a conocer las interioridades de todo ciudadano del mundo, incluyendo los de su propia nación, que en un momento determinado pueden convertirse en peligrosos y tratar de que en la nación impere la ley, se respete lo planteado en la constitución y sus enmiendas y que “We the people” vuelva a gobernar como una verdadera democracia.

Dentro de los métodos que utiliza el Estado Policiaco y que recientemente han tenido una amplia publicidad, gracias a Edward Snowden, están los de intercepción y archivo de todo tipo de mensaje, la recopilación de datos procedentes de tarjetas de crédito y otras fuentes, los de identificación de los individuos, tanto facial como dactilar, de su voz y cualquier otro parámetro físico, que mediante métodos computarizados son guardados en un expediente personal de cada persona.

Recientemente se conoció que la Agencia Nacional de Seguridad, la NSA, intercepta y recopila diariamente más de 55,000 imágenes de personas, que se utilizan como banco de imágenes para la actividad de reconocimiento facial de las mismas. Estas imágenes no son solamente de ciudadanos de otros países, sino que también se recopilan las de ciudadanos estadounidenses.

Según se ha planteado la actividad de recopilación de imágenes ha llegado a totalizar diariamente cerca de un millón de estas, pero no todas tienen la calidad necesaria para poder incluirlas en el proceso de digitalización y posteriormente utilizarlas en el banco de imágenes. Por parte del gobierno estadounidense se realizan esfuerzos por incrementar la cantidad diaria de imágenes que pueden ser utilizadas.

Las fuentes de suministro de imágenes son variadas. Estas incluyen las fotos que se entregan para pasaportes, solicitudes de visado, licencias de conducción, todo tipo de licencias y gestiones legales que se realicen en tierra o representaciones estadounidenses.

Dentro de los planes de “cooperación” de Estados Unidos con una buena cantidad de países y con el pretexto, entre otros, de la lucha contra las drogas, el lavado de dinero y el terrorismo, han ofrecido a estos los medios necesarios para la digitalización de fotos, con el requerimiento de que sean enviadas a Estados Unidos los resultados de esta actividad, para tener “un control centralizado” de la misma. Los equipos “donados” por Estados Unidos se utilizan en la confección de pasaportes, controles aduanales y algunos han sido ubicados en la confección de carnets de estudiantes en universidades y bibliotecas. El país receptor no tiene que pagar un centavo por esos equipos.

La actividad de la NSA no termina ahí, se aprovechan imágenes ya digitalizadas que se publican en periódicos, revistas, boletines, los famosos FACEBOOK, TWITTER y otros similares, fotos que se remiten a familiares y amigos mediante el correo electrónico, videos, en fin cualquier imagen que navegue por INTERNET, cuyos nudos de comunicación están en Estados Unidos. Pueden también utilizarse imágenes que se publiquen en libros, periódicos y revistas no digitales cuya calidad permita el escaneo de la misma con la calidad requerida. En esta labor se utilizan fuentes procedentes de todos los países del mundo.

En esta labor del banco de datos para el reconocimiento facial se utilizan programas computarizados de alta precisión y rendimiento, que permitan procesar y seleccionar las imágenes dentro de la gran cantidad que se recopilan diariamente.

Los abogados de la NSA han planteado que las leyes estadounidenses relacionadas con la vigilancia y la privacidad no incluyen la protección al ciudadano sobre la recopilación por parte del gobierno de su imagen facial, sin embargo todo esto se mantiene en el más estricto secreto, lo cual no sería necesario hacer si no se estuvieran violando las leyes y la privacidad de los ciudadanos.

El Estado Policiaco sigue incrementando sus controles, al igual que incrementa la utilización dentro del país de armas no letales, drones y también armas letales con el fin de poder reprimir a los que muestren su descontento con no tener trabajo, vivir en la pobreza, no tener una casa donde vivir, pasar frio en el invierno y ver como sus hijos pasan necesidades mientras otros viven derrochando la riqueza del país.

4 de junio de 2014

Dr. Néstor García Iturbe es editor del boletín electrónico El Heraldo (Cuba)
sarahnes@cubarte.cult.cu

Imagen: Prensa Latina

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